El Villarreal atraviesa un momento muy complicado tanto en Liga como en Europa League y esta semana tiene dos oportunidades perfectas para darle la vuelta y demostrar a su afición que los últimos tropiezos no han sido más que una terrible racha pasajera. El miércoles es la primera, y es que empieza el periplo de los groguets en una nueva competición, la Copa del Rey, donde pueden hacer borrón y cuenta nueva de las últimas semanas ante un rival muy humilde, el Toledo. Cuatro días después, los de Escribá viajan a Butarque para enfrentarse a un Leganés extremadamente mermado por las lesiones; por lo que podrán desquitarse de los malos precedentes ligueros y dar un golpe sobre la mesa.

Sobre estos dos partidos que vienen ha hablado Samu Castillejo, uno de los que más tesón ha puesto en estas malas actuaciones colectivas. Echando la vista atrás y buscando una explicación a los resultados adversos, apeló a uno de los elementos que más cabreos provocan a entrenadores y aficionados. “Todo el equipo debe tener intensidad, desde el portero hasta el delantero. Debemos correr todos”.

Más concretamente, haciendo alusión al partido del pasado domingo frente al Alavés, el malagueño afirmó que, a su parecer, el fallo había estado en que el equipo tenía que haber entrado “un poco más metido en el partido”. No obstante, quiso poner la mirada en lo que viene, porque las derrotas pasadas ya no se pueden arreglar. “Esto se soluciona ganando el miércoles en Toledo y el domingo en Leganés”.

Sobre el primero de estos partidos, Samu quiso advertir acerca del exceso de confianza que suele afectar a los equipos de la talla del Villarreal ante rivales, a priori, de un nivel muy inferior. “Hay que respetar a todos los rivales y el Toledo es uno más”.  En su opinión, el choque del miércoles en el Salto del Caballo será “un partido donde habrá que dar el máximo para ganar”.