Las miradas están puestas en el Villarreal. Se han reunido todos los elementos para que el encuentro de mañana (19:00 horas) se torne un duelo muy interesante. Sobre el papel, el conjunto amarillo es claramente superior al equipo de Onésimo Sánchez, pero la Copa no distingue entre pequeños y grandes. Y el Submarino puede dar buena prueba de ello, pues en los últimos años ha protagonizado vergonzosas eliminaciones en la competición del K.O.
Tras cosechar solo una victoria en seis encuentros (entre Liga y Europa League), los de Fran Escribá afrontan una semana complicada, pues además del choque copero deberán visitar el próximo sábado al CD Leganés. La asignatura pendiente del Villarreal, los partidos fuera de casa, decidirá si el equipo amarillo puede seguir la estela de Atlético de Madrid y Sevilla. Hasta el momento, el conjunto levantino solo ha ganado un encuentro lejos de El Madrigal, en la jornada tres ante el Málaga (0-2).
Curiosamente, la historia del Submarino con la Copa varía radicalmente cada temporada. Grandes éxitos como las semifinales de la 14-15 o los cuartos de final de las campañas 86-87, 01-02, 07-08 y 10-11, contrastan con los fracasos ante Girona (04-05), Poli Ejido (08-09) o Mirandés (11-12). El mejor registro del Villarreal data de la pasada temporada 2014-2015, cuando eliminó a Cádiz, Real Sociedad y Getafe, antes de caer en semifinales ante el FC Barcelona (6-2 global).
Granada CF (temporada 2000-2001)
El primer fracaso sonado del Villarreal en la Copa del Rey data de un 2 de enero del año 2001. El conjunto amarillo vivía su temporada de retorno a Primera División, tras el descenso en 1998. Su rival en dieciseisavos fue el Granada, conjunto que por aquel entonces militaba en Segunda División B. Además, no existía la doble eliminatoria y el pase a octavos se definiría a partido único.
El Villarreal visitó el Estadio de Los Cármenes con el año 2001 recién estrenado. La igualdad reinó en el terreno de juego y no hubo goles hasta el emocionante tramo final. Diego Cagna marcó el 0-1 (77') y ponía al Submarino con un pie en octavos, pero Naco Fierro empató en los últimos momentos del choque (89'). El partido se decidió en la tanda de penaltis, con el Granada como equipo vencedor por un marcador de 4-2, eliminando a todo un Primera como el conjunto amarillo, y propiciando su primer fracaso copero ante un equipo de 2aB.
Hércules CF (temporada 2002-2003)
Con la temporada 02-03 dando sus primeros coletazos, Villarreal y Hércules se enfrentaban a partido único en el Estadio Rico Pérez. Esta vez, el duelo correspondió a treintaidosavos de final de la Copa del Rey. El conjunto alicantino militaba en Segunda División B por aquel entonces, mientras que el Villarreal se había consolidado en la máxima categoría.
Un martes 10 de septiembre de 2002, la hazaña copera volvió a aparecer. El Hércules se adelantó con un tempranero gol de Lafuerza (11'), metiendo el miedo en el cuerpo a los amarillos. El Villarreal logró empatar en el acuador de la segunda mitad, por mediación de Martín Palermo (65'), pero la épica alicantina surgió en los minutos finales y Borge marcó el definitivo 2-1 (82') que eliminaba al conjunto castellonense de la Copa del Rey 02-03.
Girona FC (temporada 2004-2005)
Dos temporadas después, el Submarino volvió a caer ante un Segunda B. Corría el mes de octubre, y el Villarreal alternaba Liga con Copa de la UEFA, siendo uno de los equipos que mejor fútbol practicaba de la categoría y compitiendo codo con codo con grandes clubes europeos. Por su parte, el Girona recalaba en la categoría de bronce del fútbol español.
El encuentro, correspondiente a treintaidosavos de final de la Copa del Rey 04-05, se disputó en el Estadio de Montilivi. Los amarillos se pusieron por delante con un gol de Peña (50'), y las esperanzas de pasar a dieciseisavos crecían. Sin embargo, en cuestión de cuarto de hora, el equipo catalán borró la sonrisa del Villarreal. Los tantos de Caballero (73', penalti) y Eloi (87') remontaron el 0-1 inicial y certificaron el pase del Girona a la siguiente ronda, mientras los amarillos caían eliminados.
Real Valladolid (temporada 2006-2007)
Con el año 2007 recién empezado, los octavos de final de Copa del Rey daban un poco de tregua a la competición liguera. El Villarreal venía de eliminar al CD Castellón por un global de 0-4, mientras que el Valladolid había goleado al Gimnàstic (4-1 global) para avanzar a la siguiente fase. A diferencia de las campañas anteriores, aquí ya existía la doble eliminatoria, por lo que el margen de sorpresas coperas se redujo. Sin embargo, las cosas no cambiaron para el Villarreal en la Copa del Rey.
Villarreal y Valladolid se verían las caras en los octavos de final. La ida, disputada un 10 de enero de 2007 en el Estadio José Zorrilla, finalizó con un marcador de 2-1. Una vez más, los amarillos perdieron a domicilio ante un rival de menor categoría (los pucelanos militaban en Segunda División). Roberto Losada (19') y Jose Mari (20') fueron los goleadores en la primera mitad. En la segunda, Joseba Llorente marcó el 2-1 para los locales (69') y Guille Franco fue expulsado a seis minutos del final (84').
En el encuentro de vuelta, disputado una semana después, el Villarreal fue incapaz de remontar el 2-1 en El Madrigal ante un equipo de Segunda A. Javier Baraja adelantó al Valladolid de penalti (26'), tanto que propició la desesperación amarilla, traducida en la expulsión de Cani al filo del descanso por doble amarilla. En los segundos 45 minutos, el Villarreal lo intentó pero no pudo superar el muro pucelano, pese a que los visitantes también se quedaron con 10 por la expulsión de Chema (76'). El Valladolid alcanzó los cuartos de final, y el Villarreal cayó eliminado.
Polideportivo Ejido (temporada 2008-2009)
A día de hoy, la mayor humillación del Villarreal en la Copa del Rey, y sin duda, a la altura de míticos sucesos como 'el Alcorconazo'. El Villarreal, equipo que dicha temporada 08-09 disputaba la UEFA Champions League, se enfrentaba al Poli Ejido, conjunto de la Segunda División B. Las diferencias entre ambos equipos eran enormes, y aún así estas no existieron durante los 180 minutos de eliminatoria. Los almerienses venían de eliminar a la UD Melilla.
El partido de ida, disputado un 29 de octubre de 2008 en el humilde Municipal de Santo Domingo, finalizó con un sorprendente 5-0. El equipo andaluz barrió por completo a los de Pellegrini, que fueron un juguete en manos de los locales. El Villarreal salió humillado de El Ejido y con la eliminatoria prácticamente imposible. Jorge Molina, con un hat-trick (9', 37' y 51') y Gregory (79' y 88') fueron los goleadores del encuentro, sellando una manita inexpugnable ante un equipo de Champions.
En el encuentro disputado en El Madrigal el 12 de noviembre de 2008, el Poli Ejido volvió a cuajar un gran partido y certificó el pase a octavos de final. Los almerienses fueron superiores al Villarreal en su estadio y se adelantaron en el marcador por mediación de Jorge Molina (49'). Poco después, Guille Franco empataba el choque (53') y maquillaba el escandaloso marcador global de la eliminatoria, que resultó ser de 6-1. Las expulsiones de Raúl Torres (75') y Javi Venta (78') no cambiaron el curso del partido ni el devenir de la eliminatoria. El Submarino Amarillo fue eliminado y humillado en su competición maldita, y el Poli avanzó a octavos, donde cayó con polémica ante el RCD Espanyol.
Celta de Vigo (temporada 2009-2010)
La mala suerte jugó un papel importante en esta eliminación copera del Villarreal. No hay excusa, pues el rival, aunque muy competitivo, militaba en Segunda División. Villarreal y Celta se medían en octavos de final, tras derrotar a la UD Puertollano y al CD Tenerife respectivamente. Los amarillos vivían una temporada irregular, peleando por alejarse de los puestos de descenso, mientras que los vigueses luchaban por ascender a Primera.
En el partido de ida disputado en Balaidos, los amarillos consiguieron un valioso empate (1-1) que, pese a ser resultado decepcionante ante un rival de inferior categoría, dejaba la eliminatoria favorable para el Villarreal. Giuseppe Rossi adelantó a los castellonenses (12'), pero Arthuro empató el choque al filo del descanso (44'). La segunda mitad fue igualada y las tablas no se movieron.
El encuentro de vuelta en El Madrigal fue un partido de poder a poder. La igualdad predominó durante los 90 minutos y parecía que el 0-0 imperaría en el marcador final. Con el Villarreal ya figurándose en cuartos de final (por el valor doble de los goles de visitante), el Celta metió una marcha más y consiguió un penalti a favor en el minuto 90. Trashorras no falló y transformó el 0-1 definitivo desde los once metros. Los de Valverde se despedían de la competición de forma cruel, mientras que el Celta alcanzó los cuartos.
CD Mirandés (temporada 2011-2012)
Posiblemente, el fracaso copero más célebre del Submarino junto con la eliminación ante el Poli Ejido. El Villarreal, entrenado por Juan Carlos Garrido, deambulaba por la competición doméstica, coqueteando con el descenso. Eliminado de Champions (0 puntos) y en una delicada situación, se agarraba a la Copa como tabla de salvación. Su rival en aquellos dieciseisavos de final fue el Mirandés, equipo de la Segunda División B que pasaría a la historia por dicha edición de la Copa del Rey.
El encuentro de ida se disputó un martes 13 de diciembre de 2011 en el Municipal de Anduva. Alain adelantó a los locales (26') en un duelo en el que el Mirandés fue muy superior al Villarreal. Los rojillos superaron a los amarillos en todas las facetas de juego y merecieron un marcador más abultado del que finalmente conseguirían. San Pascual se le apareció al equipo castellonense y Borja Valero marcó el 1-1 final (81') que dejaba una ligera ventaja a los levantinos de cara al encuentro de vuelta.
El Madrigal sucumbió ante un equipo de Segunda B con alma de Champions. El Mirandés, una vez más, dio un baño brutal al conjunto amarillo. César, el guardameta local, atajó un penalti en los primeros minutos, dando vida a su equipo y aplazando el huracán de los de Pouso para más adelante. En la segunda mitad, el Mirandés se desmelenó y apuntilló al Villarreal, que con el 0-0 estaba clasificado para octavos. Pablo Infante, que se convertiría en el pichichi de aquella Copa del Rey 11-12, marcó el 0-1 (60') y dilapidó las esperanzas locales. A tres minutos del final, Infante hacía el 0-2 con un golazo brutal, bailando a varios defensas amarillos y batiendo a César. Mateo Musacchio fue expulsado (90'), fruto de la desesperación. Tras la derrota, el técnico Garrido fue destituido de su cargo tras año y medio como entrenador del Villarreal.
El Villarreal fue eliminado y terminaría descendiendo a Segunda División tras un fatídico final de temporada. Por su parte, el Mirandés logró el ascenso a Segunda y alcanzó las semifinales de la Copa, cayendo ante el Athletic Club. El humilde equipo de Miranda se llevó a tres Primeras por delante: Villarreal, Racing de Santander y RCD Espanyol.
SD Ponferradina (temporada 2012-2013)
Tras una desastrosa campaña 11-12, el Villarreal descendió a Segunda. El comienzo fue esperanzador, con el equipo amarillo instaurado en las primeras posiciones de la clasificación. Entre medias, el equipo amarillo debía afrontar la segunda ronda de la edición 12-13 de la Copa del Rey. El sorteo lo emparejó con la Ponferradina, conjunto que también militaba en la Liga Adelante, pero con aspiraciones muy por debajo de las del equipo castellonenses, pues el conjunto berciano acababa de ascender.
Villarreal y Ponferradina se verían las caras a partido único, y con la tercera ronda (última antes de dieciseisavos) en el horizonte. El encuentro se disputó un miércoles 12 de septiembre de 2012 en El Madrigal, con un marcador final de 0-2 favorable al combinado berciano. La Copa, nuevamente, le jugó una mala pasada al conjunto amarillo. El choque fue igualado, pero la defensa local mostró claros síntomas de debilidad, aspecto que los de Claudio Barragán aprovecharon para dinamitar al Submarino Amarillo. Wellington Silva (56') y Ander Lafuente (90') fueron los goleadores del partido.
La eliminación dejó al Villarreal con la Liga como único frente abierto, mientras que la Ponferradina avanzó a tercera ronda, eliminando al Huesca y finalizando su andadura en dieciseisavos (el Getafe fue su verdugo). Al término de dicha temporada, el equipo amarillo recuperó la categoría.