El Villarreal viaja esta misma tarde a El Molinón para disputar a las 13h su último partido de Liga en este 2016, tras dos victorias muy importantes que han cambiado el run-run por aplausos de su afición. Pero ahora, ha llegado el momento de dar la cara también lejos de casa.

El técnico amarillo no es ajeno a esta situación y aseguró que el equipo debe dar un paso al frente en El Molinón: “El equipo debe dar un salto y no distinguir tanto lo que hace en casa y lo que hace fuera. Somos conscientes de que debemos mejorar como visitante. Hemos logrado buenos resultados, pero queremos ganar otra vez”, explicaba Escribá tras el entrenamiento de esta mañana.

El entrenador valenciano también dio la lista de convocados, con un total de 7 bajas por lesión, en jugadores clave y dejando así la defensa y los extremos del Submarino bastante mermados, aunque no le preocupan: “El equipo está bien y eso no me preocupa”, añadía antes de llamar a la calma: “Venimos de un partido muy importante que jugamos con las mismas bajas y el equipo supo responder muy bien. Por ello, esperamos que en Gijón podamos hacer lo mismo, y que demos un buen nivel en este encuentro”, dijo Fran Escribá.

El técnico, además, no dudó en analizar al rival, el Sporting de Gijón, un rival que está necesitado de puntos para salir de la zona baja de la clasificación y respirar antes del nuevo año, pero la afición rival apretará mucho a su equipo: “Es un estadio que aprieta mucho, un campo de los complicados de La Liga, pero a la vez bonito por el ambiente. Ellos necesitan sumar y les llega un partido contra un equipo al que si le ganan les daría mucha moral para afrontar el parón”, sentenció Escribá. El equipo quiere terminar de cambiar la mala racha de las últimas semanas y qué mejor forma de hacerlo que ganando en el último partido de Liga del año y afrontar el parón desde puestos Champions.