Con toda probabilidad, uno de los momentos más emotivos en la carrera de Dénis, sino el que más, fue el 15 de junio de 2016, día en que dejó de ser propiedad del Real Madrid, ya que llevaba en el cuadro de la capital más de una década. Fue progresando en las categorías inferiores hasta ser cedido al Sevilla en 2013, operación con la que el Real Madrid pretendía que Cheryshev cogiese ritmo competitivo en un club de alto nivel, ya que en el cuadro merengue no podía disfrutar de los minutos requeridos para ello. Tras esa infructuosa cesión, debido a las múltiples lesiones del nacido en Novgorod, recaló en el Villarreal una temporada después; su buen hacer en tierras castellonenses llevó a Benítez a reclamar un hueco para él en su plantilla. No obstante, los pocos minutos de los que dispuso, unidos al ´escándalo de Cádiz´ le llevaron al Valencia mediante otra cesión hasta final de curso. Finalmente, en el último mercado estival pasó a ser propiedad del ´submarino amarillo´.

Un comienzo irregular de su andadura profesional

Tras haberse criado en las categorías inferiores del Sporting de Gijón, club donde jugaba su padre (1995-2000) y en el Burgos Promesas (2000-2002), el Real Madrid decidió ficharlo para sus categorías inferiores. Fue ascendiendo progresivamente hasta formar parte del Real Madrid Castilla, en la 2010-11. Se mantuvo tres temporadas en el filial blanco e incluso tuvo minutos con el primer equipo en algún amistoso. La temporada 2013-14, pese a ganar la UEFA Europa League con el Sevilla, no resultó especialmente para el ruso, ya que solo pudo disputar cuatro partidos ligueros y uno de Europa League por infinidad de problemas musculares. Desde pequeño, Denis demostró un gran talento y verticalidad por la banda de los estadios, pero sus frecuentes lesiones resultaban una losa demasiado pesada como para dar un salto exponencial de calidad.

La temporada 2014-15, inolvidable para ´Chery´

Después del mundial de Brasil, en verano de 2014, que Cheryshev jugó con la selección rusa, éste recibió una llamada que le cambiaría la vida: Marcelino García toral, por aquel entonces entrenador del Villarreal, contactó con él para ofrecerle un puesto en su equipo. El asturiano tenía planeado dar un salto de nivel para la competición europea y confiaba en tener jugadores como Dénis, aunque no le garantizó un puesto en el 11. La respuesta fue afirmativa, y seguramente no se arrepentirá de aquella decisión. Poco a poco fue adueñándose de la banda izquierda, y fue, junto a Luciano Vietto, el principal artífice de la meritoria temporada de los groguets; entre ambos formaron una dupla letal que los clasificó de nuevo para Europa. El ´17´ en aquel momento destacó especialmente por sus asistencias de gol, y fue el cuarto máximo asistente pese a perderse el tramo final por lesión. No obstante, también anotó una cifra poco desdeñable de goles; algunos, como ante la Borussia MG o el Barcelona, especialmente recordados. Pese a lesionarse a falta de 10 jornadas y perderse el tramo final de temporada, sin duda el ruso mostró un gran rendimiento.

Amago de confianza de Benítez y posterior cesión al Valencia

Con la destitución de Carlo Ancelotti y la contratación de Rafa Benítez como entrenador del Real Madrid, el español decidió apostar por dos jugadores que habían cedido a equipos de la liga española y que mostraron un gran nivel: Cheryshev y Lúcas Vázquez. En el caso del gallego, su vuelta a Valdebebas fue plenamente acertada, ya que contó desde el inicio con la confianza del técnico. Sin embargo, Dénis no corrió tanta suerte; disfrutó de minutos en dos partidos de liga y uno de Copa del Rey. Éste último, el más conocido debido a la ilegalidad de su alineación, ya que se encontraba sancionado desde la Copa del Rey 14-15, donde vio tres amarillas con el Villarreal. Por ello, pese a la victoria madridista por 1-3 en Cádiz, fueron los gaditanos los que avanzaron a dieciseisavos, quedando así muy dañada la figura de Benítez, Chendo y Cheryshev.

Por todo ello, el cuadro blanco decidió cederlo de nuevo en el mercado invernal; Sevilla, Villarreal y Valencia eran los mayores interesados. La gran primera vuelta del Villarreal, que estaba a un punto del Real Madrid, unida al bochorno de Cádiz, del que los madridistas acusaron al cuadro de La Plana, bloquearon las negociaciones con los amarillos. Como el ruso ya había probado fortuna en tierras hispalenses sin éxito, se decidió apostar por el conjunto ché, quien además necesitaba seriamente refuerzos, pues llegó a pensar en la posibilidad de descender. Cheryshev aterrizó en Valencia con buen pie, ya que anotó goles en tres de sus primeros seis partidos disputados (Espanyol, Málaga y Atlético), aunque la enésima lesión muscular lo apartó de los terrenos de juego. Sólo jugó 20 minutos más en toda la temporada, curiosamente, ante su equipo actual, salió ante el Villarreal en un duelo que ya iba 0-2 para los amarillos y recayó de su lesión, de la que fue operado en mayo y que duró hasta septiembre.

Vuelta extraña a tierras castellonenses

Pese a lo inoportuno de su percance, que le impedía disputar la pretemporada, Fernando Roig apostó por él en verano, esta vez para llevárselo en propiedad. El extremo hubo de entrenar al margen de sus compañeros hasta inicios de septiembre, y no disfrutó de minutos hasta la jornada tercera y no partió como titular hasta el primer duelo de Europa League. Hasta el momento, ha disputado solo ocho partidos de liga, tres de Europa League y uno de Copa, sin anotar ningún gol. La gran competencia que tiene con hombres como Castillejo o Soriano y las reincidentes recaídas explican el poco protagonismo de un jugador con ganas de reivindicarse y explotar definitivamente.

Mal bagaje en los derbis de la Comunitat

Dénis Cheryshev es, junto a Víctor Ruíz o Marchena, entre otros, uno de los pocos jugadores que ha defendido ambas elásticas en los derbis. Y lo cierto es que no ha tenido demasiada suerte en ellos: en la temporada 2014-15, su Villarreal claudicó 1-3 en el partido de ida ante los chés y el encuentro de Mestalla, que se perdió por lesión, acabó con empate sin goles. No pudo participar en el derbi de nochevieja de 2015, ya que formaba parte de la plantilla del Real Madrid, aunque llegó a disputar unos minutos del duelo de vuelta, cuando el Villarreal se impuso por 0-2 en Mestalla. Tres derbis para el ruso que se saldan con un único punto que, para mayor inri, se consiguió cuando él no jugaba; los aficionados groguets esperarán que termine la racha, mientras que los valencianistas desearán que siga vigente, al menos, este sábado.