El partido ante la Roma dejó, aunque no lo parezca, un dato muy positivo. Manu Trigueros jugó ayer con el Villarreal su partido número 200 con la camiseta del Villarreal en el primer equipo. Todo un hito para el club, cuando hablamos de un jugador que esta temporada ha dado un paso al frente y se ha consolidado como uno de los mejores mediocentros de esta Liga Santander. Recién renovado hasta 2022 con una alta cláusula y sobre todo, con la sensación de que es un indiscutible en el Submarino.

El joven talaverano, empezó su carrera futbolística en el Real Murcia Club de Fútbol Imperial, donde estuvo tan solo dos años (2008-2010), antes de que el Villarreal se fijase su calidad y le llamase para formar parte de su filial, donde jugó 26 partidos en dos años y anotó tres goles. El varapalo del descenso del primer equipo en 2012, llevó a Trigueros a dar el salto al primer equipo, donde empezó peleando en Segunda División por el ascenso, que finalmente se logró. Desde 2012, y sobre todo de la mano de Marcelino García Toral el manchego ha ido creciendo de una forma espectacular, aunque poco a poco el sistema del Villarreal fue cambiando y su juego se vio afectado. Este año, con la llegada de Escribá y el cambio de forma de juego, ha hecho que Trigueros de un paso al frente y se haya consolidado como pieza clave.

Cada semana, el talaverano ha maravillado a todos los aficionados amarillos, que han vuelto a apreciar el talento que tiene Trigueros en sus botas. Siempre con cabeza fría y sobre todo, con las ideas claras. Que nadie intente robarle el balón, porque no va a poder. En un total de 200 partidos con el Villarreal ha anotado 16 goles, demostrando un gran tiro desde fuera del área, su punto fuerte, sin duda.

200 partidos más tarde, el ‘14’ del Villarreal se consolida como indiscutible, pero por encima de todo, lo más importante es pensar que de momento, esa cifra irá en aumento, porque su talento siempre será una buena señal para el Submarino.