Hace tan sólo un par de meses, la zona atacante del conjunto castellonense parecía estar bajo mínimos: las lesiones de Bakambu y Soldado y la inoperancia de Santos Borré dejaban como únicos arietes disponibles a Sansone y Pato. Curiosamente, éstos han sido los dos únicos que no han podido gozar de minutos en los últimos choques con la elástica amarilla; el primero por unas molestias en el sóleo y el segundo por su marcha a China.

En poco más de sesenta días se ha revertido la situación radicalmente: la vuelta a los terrenos de juego de los lesionados, unida a la incorporación de Adrián López y la notable mejora de Santos Borré han dejado en una situación muy favorable, sino óptima, al técnico amarillo de cara a las alineaciones. Si Sansone recupera el buen nivel mostrado hasta sus problemas musculares, la afición del Estadio de La Cerámica podría comenzar a divertirse de lo lindo.

Inicio complicado de temporada

El inicio de temporada no resultó nada fácil para la mayoría de los hombres encargados del gol en Vila-Real: Soldado sufrió una grave lesión en agosto, Bakambu parecía no recuperarse de una dolencia de pretemporada que parecía leve en principio y a Borré le costaba adaptarse de un modo rápido a su nuevo club.

Tan sólo la garra, verticalidad y polivalencia de Sansone y la calidad técnica de un Alexandre Pato que llegó a la localidad de La Plana en mejor condición física de la esperada supusieron un buen rendimiento ofensivo en los primeros meses de competición. Afortunadamente para los amarillos, los lesionados que ya lo estaban, a excepción de Soldado, y los que iban sufriendo diversos males, fueron reincorporándose progresivamente a las convocatorias. Nicola Sansone era el menos aquejado por problemas físicos; Bakambu y Pato se rotaban junto a él en la pareja de delanteros, en la que participaba ocasionalmente Borré. Poco a poco, la plantilla de Escribà mejoraba en salud, número y calidad.

A pesar de la incipiente mejora de la parcela atacante de los groguets, la mayoría de los puntos y el decente bagaje en liga seguía debiéndose, principalmente, al extraordinario rendimiento de la zaga y del maltrecho Sergio Asenjo. Tanto los extremos como los delanteros iban aumentando sus prestaciones, pero siempre les faltaba un poco de acierto para lograr resultados increíbles.

Notable mejora en los últimos choques

El factor principal causante del gran crecimiento de todos los hombres de ataque se antoja, sin lugar a dudas, la vuelta de Roberto Soldado tras su larga lesión. Con su retorno a los terrenos de juego, el resto de delanteros parecen haber ganado en compromiso y esfuerzo; como consecuencia, todos ellos muestran un mayor rendimiento. El ´9´ era el impulso necesario dentro del césped para motivarles a luchar siempre un poquito más.

El único refuerzo de invierno, Adrián López, cedido por el Porto, aun no ha conseguido estrenarse de cara al gol, pero aporta versatilidad y buenas asistencias a sus compañeros, y Santos Borré parece haber reunido en pocas semanas el acierto cara a portería del que adoleció desde agosto hasta febrero. En definitiva, el 9, 15, 17, 18 y 24 amarillos progresan cada día, y quizá la tabla clasificatoria lo refleje a final de temporada.