Vuelve La Liga. Tras el parón de selecciones nacionales, regresa el campeonato liguero con un tramo final apasionante. Restan 10 jornadas para la conclusión, y en el caso de Villarreal y Eibar los encuentros que quedan por disputar determinarán su futuro en la temporada 2017-2018. El conjunto amarillo, instaurado en la quinta plaza, busca un milagro para superar al Atlético de Madrid y lograr la cuarta posición, que da acceso a la previa de Liga de Campeones. Por el camino, tendrá que tener cuidado con la Real Sociedad, que suma los mismos puntos que los 'groguets', y podría acechar su quinta posición. Mientras, el Eibar, situado a las puertas de Europa, buscará dar la sorpresa y arrebatar el séptimo puesto al Athletic Club, que tiene a solo 3 puntos, y que en el caso de que el Barça ganase la Copa del Rey, daría acceso a UEFA Europa League. El sueño armero sigue vivo, y la pelea por Europa sigue más viva que nunca. 

El Eibar, entrenado por José Luis Mendilibar, es octavo clasificado con 41 puntos, a dos puntos de la cifra matemática de salvación, por lo que el cuadro vasco tiene la permanencia prácticamente hecha. Ahora, el objetivo se ha tornado ambicioso y apunta hacia el viejo continente. Los armeros quieren conseguir su primera clasificación para jugar competición europea y así labrar un nuevo sueño para la historia del club: representar a la humilde ciudad de Éibar por la gran Europa. Para ello, tendrán que alcanzar la séptima plaza, que actualmente ocupa el Athletic, y esperar un triunfo del Barça en la final de la Copa del Rey. Solo 3 puntos separan a ambos equipos vascos, sin olvidar tampoco a Villarreal y Real Sociedad, que son quinto y sexto respectivamente, pero se alejan a 7 puntos del Eibar.

El balance de los de Mendilibar es de 11 victorias, 8 empates y 9 derrotas, con 44 goles a favor y 39 en contra, pero su mayor baza para lograr el nuevo objetivo es Ipurúa. Si bien es cierto que el cuadro armero compite tanto fuera como en casa, su rendimiento como local es sorprendente y arroja datos muy positivos, algo de lo que no podrá disponer mañana en el Estadio de la Cerámica. En su último encuentro en La Liga, el equipo vasco empató en su feudo (1-1) ante el RCD Espanyol, luego de adelantarse en el marcador por mediación de Kike García (20'), y ver como le empataban el partido en la segunda mitad. Marcó Jurado (50') para los pericos. 

La progresión del club armero está siendo espectacular. El conjunto vasco acumulará cuatro temporadas consecutivas en Primera División la próxima campaña, después de cinco años en los cuales ha pasado de jugar en Segunda B a ascender a la máxima categoría y estar a las puertas de los puestos europeos. El sueño de la SD Eibar evoluciona paso a paso y la consolidación en Primera es un hecho. Ipurúa, un pequeño estadio, cuenta con un gran espíritu que intimida a los rivales, como si del mítico Anfield se tratase, y es así que solo grandes como el Real Madrid, FC Barcelona y Atlético de Madrid han conseguido ganar esta temporada en el feudo eibarrés, además del colista Osasuna en la jornada 5 del campeonato (2-3). 

Del sueño del ascenso a la consolidación

La SD Eibar y el pequeño municipio guipuzcoano están inmersos en un sueño. Y solo cinco años han hecho falta para pasar de la humilde Segunda División B a la lujosa Primera División del fútbol español. Después de un último paso por la categoría de plata en la 2008-2009, cuando el cuadro armero descendió al finalizar 21º, el Eibar pasó cuatro campañas en el grupo 2 de la Segunda División B, acabando entre los tres primeros en todas y cada una de ellas, pero cayendo en las eliminatorias por el ascenso. Sin embargo, luego de una gran temporada 2012-2013, en la que finalizó segundo clasificado, los vascos eliminaron a CD Alcoyano (3-3 global), Real Oviedo (3-1 global) y Hospitalet (4-0 global) y lograron ascender de nuevo a Segunda División. 

Ya en Liga Adelante, y con la condición de recién ascendido, el Eibar cuajó una temporada 2013-2014 sensacional, logrando el campeonato y finalizando primero en la tabla con 71 puntos, por encima de clubes más poderosos como el Deportivo de La Coruña, el Sporting o la UD Las Palmas. Al acabar primero, el equipo armero logró el ascenso a Primera División de forma directa, logrando alcanzar la máxima categoría por primera vez en su historia. Un sueño que parecía imposible, se había logrado. 

La campaña 2014-2015 fue histórica. El debut en Primera División se produjo en un apasionante derbi vasco de la jornada 1, entre Eibar y Real Sociedad en Ipurúa. Los locales consiguieron la victoria (1-0), con un golazo de libre directo firmado por Javi Lara. Durante la primera vuelta del campeonato, los de Garitano se establecieron entre los 10 primeros de la clasificación, acechando incluso la zona europea en determinadas jornadas, con grandes partidos como la goleada al Almería (5-2), el triunfo en Balaídos (0-1) o el épico empate ante el Levante (3-3). Sin embargo, la segunda vuelta no pudo ser peor. El equipo armero solo logró 7 puntos desde la jornada 20 a la 38, ganando solo dos partidos (1-0 ante el Málaga y 3-0 frente al ya descendido Córdoba en la última jornada) y cosechando 15 derrotas, lo que terminó por hundir al equipo eibarrés. Los de Gaizka Garitano tuvieron opciones de salvación hasta la última jornada, pero la goleada al Córdoba en Ipurúa no sirvió de nada ante el sorpresivo empate del Deportivo en el Camp Nou (2-2), por lo que el Eibar descendió a Segunda tras finalizar 18º con 35 puntos. Pero un rayo de esperanza iluminó la ciudad de Éibar. El Elche, que había conseguido la permanencia finalizando 12º en Liga, fue descendido a la categoría de plata por impagos e irregularidades con Hacienda, cediendo su plaza en la máxima categoría al descendido Eibar. 

La primera experiencia en Liga BBVA le sirvió al Eibar para no cometer los mismos errores en su segunda temporada en la máxima categoría y así fue. Los armeros cuajaron una gran primera vuelta, ya con Mendilibar en el banquillo, situándose en la zona noble de la clasificación. En la segunda, pese a que bajaron el ritmo y cedieron más derrotas de lo esperado, lograron la salvación al terminar 14º con la suma de 43 puntos. Así, el Eibar se aseguró una tercera aventura en Primera División, en la que las aspiraciones finales iban a cambiar radicalmente. 

En las dos primeras campañas del cuadro guipuzcoano en la máxima categoría, se repitió el mismo patrón. Gran primera vuelta, rozando los puestos europeos, pero mala conclusión del campeonato liguero tras una mala segunda vuelta. En la primera, el desenlace fue fatal, pues los equipos que ocupaban la zona de peligro lograron más puntos de lo esperado y finalmente el Eibar cayó a los infiernos, pese a ser rescatado por el descenso administrativo del Elche. Un año después, se repitió la historia, pero los armeros cambiaron el signo de varios partidos de la derrota al empate y la suma de puntos fue suficiente para permanecer en Primera. Sin embargo, actualmente, en la jornada 29, los de Mendilibar siguen ocupando una posición notable, limítrofe con los puestos europeos, por lo que parece ser que la tónica habitual del Eibar ha cambiado, situando la brújula hacia el norte: Europa.