Entre lágrimas. Así se despidió el central argentino del Villarreal en una rueda de prensa en la que se ha despedido del club y de su afición. Él mismo aseguraba que traía un discurso preparado en la cabeza pero la emoción pudo con él y terminó improvisando unas palabras. “Ha sido mucho más duro de lo que pensaba”, decía sin poder contener las lágrimas.

Desde que en 2009 Mateo Musacchio aterrizó en el Villarreal B, su ascenso fue meteórico y el club pronto le dio la oportunidad. En solo un año, ascendía al primer equipo de la mano de Juan Carlos Garrido y en pocos años se convirtió en pieza clave del Submarino. Musacchio era el ejemplo de canterano perfecto. "Llegué con 18-19 años, siendo muy joven y crecí como persona como jugador. Solo tengo palabras de agradecimiento. Es la realidad. No me arrepiento de nada. Han sido ocho años de darlo todo para el Villarreal", explicaba el argentino.

"Solo tengo palabras de agradecimiento"

En 2012, y tras el descenso del Villarreal a Segunda División, Musacchio decidió echar galones y quedarse en el club que le dio la oportunidad de su vida.  Por eso, continuó jugando en El Madrigal con la intención de devolver al Submarino a Primera. Aquel año en Segunda, fue la consagración de Musacchio como uno de los puntales del equipo. “Aquel año de Segunda sufrí muchísimo, pero el ascenso fue el momento más lindo de mi carrera”, contaba Musacchio.

Durante los últimos años su gran lastre fueron las lesiones de gravedad que han ido sucediéndose en el jugador y las recaídas que han impedido que tuviera continuidad con el equipo. Eso, junto a la llegada de Víctor Ruiz consiguió que la figura del central argentino fuera decayendo entre la afición. El verano pasado, el encontronazo que terminó con la destitución de Marcelino también supuso un punto de inflexión en su relación con la afición que incluso le propinó algún silbido a lo largo de esta temporada.

Mateo Musacchio se marcha al AC Milan, donde asegura que le han recibido “increíblemente bien”, aunque asegura que no ha tenido tiempo de conocer la ciudad. Pese a haberse convertido en un jugador tan principal en el equipo, se marcha con el enfado de la afición, que parece no perdonarle las formas de su marcha. Cabe recordar que no jugó las dos últimas jornadas por su fichaje por el AC Milán pese a que el equipo se jugaba la clasificación a Europa League.

"Soy un hincha más del club"

Pese a todo esto, el central no pudo contener las lágrimas cuando agradeció al club y a la afición estos ochos años que han compartido: “Ahora busco nuevos desafíos y aventuras. Agradecido al club y a la gente que siempre me trataron increíble. Siempre voy a estar pendiente, soy un hincha más del club, es toda una vida", concluyó Musacchio.

"Son muchos años y uno personalmente, no solo en el fútbol, busca crecer. Nuevos desafíos, nuevas aventuras. Después de muchas temporadas llegó el momento y creo que me voy con muchas cosas vividas y cosas muy lindas, otras menos". Con estas palabras cerraba Musacchio su despedida casi sin poder vocalizar por las lágrimas que acumulaba. Se cierra la puerta del Villarreal y se abre la del Milán para Musacchio. Y ahora el Submarino tendrá que buscar su sustituto