El submarino salió a jugar el partido ante el Maccabi Tel-Aviv sin jugarse nada y el técnico, Javi Calleja, dio la oportunidad a un gran número de jugadores del filial de demostraron que tienen un hueco en el equipo. Un once repleto de canteranos que planteó un gran partido con numerosas ocasiones aunque no encontró suerte de cara a portería.

El Villarreal no se jugaba nada ya que tenía asegurada la primera plaza del grupo lo que supone el pase a dieciseisavos de final de la Europa League.  Hasta siete canteranos (Genís, Pau, Ramiro, Chuca, Morlanes, Mario González y Darío Poveda) saltaron al campo de inicio para competir ante el Maccabi Tel-Aviv e incluso ocho si se tiene en cuenta al jugador formado en la cantera del conjunto groguet, Adrián Marín.

Con una primera parte bastante floja, el submarino reaccionó al inicio de la segunda parte con una ocasión bastante clara de Mario González. Chuca centró desde la banda derecha y el delantero burgalés llegó al remate en el segundo palo en posición forzada. El balón se fue alto.

Pese a la juventud del equipo titular, el conjunto dirigido por Javi Calleja encaja tres derrotas en los últimos cuatro partidos lo que da que pensar que al equipo le hace falta algo más pese al buen juego que se deja ver en cada partido. Javi ya ha dejado caer que muchos canteranos van a disfrutar de más minutos ya que tienen un gran potencial y tienen que protegerlos.

El míster confía en la vuelta de Samu Castillejo y Semedo para el difícil partido ante el Barcelona en el Estadio de la Cerámica (domingo, 20:45 horas). La vuelta de estos dos jugadores daría velocidad al equipo para no caer al final de los partidos pese a empezar ganando: “Tenemos un duro rival y vamos a necesitar de todos los futbolistas disponibles, de los que salgan al principio y de los que salgan del banquillo”.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Ana Martin
Fanática del deporte. Redactora en VAVEL España.