El submarino consiguió doblegar a un rocoso Getafe que tenía muy claro su objetivo, estar bien pertrechado en su campo para evitar el juego entre líneas de los amarillos, y buscar alguna jugada aislada a la contra, o a balón parado en saques de esquina o faltas
Análisis
El objetivo de los de Calleja estaba muy claro, conseguir los tres puntos a como diera lugar, y más teniendo en cuenta que dos de sus perseguidores Éibar y Girona habían perdido sus respectivos encuentros en esta jornada.
A pesar de la importancia del encuentro el míster groguet no lo dudo y metió cambios importantes en el equipo, respecto al que se puede considerar su once titular. Apostó por meter frescura en el equipo dada la carga de partidos de algunos jugadores.
A las bajas ya conocidas por lesiones de larga duración, hubo que sumar para este encuentro la del central Álvaro por acumulación de tarjetas.
Con todo esto el once de Calleja sufrió novedades importantes, en defensa entraron Bonera y Rukavina, en el centro del campo Javi Fuego y Roberto Soriano, dejando el ataque para Bacca y Enes Ünal, este en lugar de Cheryshev que había sido titular los últimos partidos.
Análisis
No pudo comenzar el encuentro de mejor manera para el Villarreal, que si de algo estaba adoleciendo en estos últimos partidos era de gol. Solo tardo dos minutos en inaugurar el marcador, cuando Castillejo se inventó un pase interior a Bacca, este se internó en el área y centro raso al segundo palo donde apareció Enes Ünal para anotar. Ya era hora que el turco tuviese suerte de cara al gol.
A pesar del gol el partido durante la primera mitad estuvo muy igualado, se disputaba cada balón en el centro del campo con mucha intensidad.
Pasada la media hora el árbitro decidió erigirse en la figura ‘negativa’ del encuentro, al señalar un penalti inexistente de Javi Fuego sobre Djené. El jugador azulón al notar la presencia del mediocentro amarillo hizo más por dejarse caer que por continuar la jugada. El árbitro no lo dudo y señalo los once metros. El penalti lo lanzo Ángel pero lo detuvo un soberbio Asenjo de magnifica estirada. El palentino le daba aire al submarino con esa parada.
Pero si el final de la primera parte fue de infarto, el comienzo de la segunda fue todavía peor. El colegiado Sánchez Martínez se inventó otro penalti en contra del submarino, cuando Jaume Costa tropezó con un contrario y este cayo dentro del área. Esta vez el Getafe cambio al hombre encargado de lanzarlo y fue Jorge Molina el que tomo la responsabilidad. Por la cabeza de todos los groguets pasó en ese momento el siguiente pensamiento: "¿Será capaz Sergio Asenjo de pararlo?". Pues sí que fue capaz. Nuevamente el palentino en una gran estirada detuvo la pena máxima, y se convirtió en el héroe del partido sino lo era ya con la parado del primer penalti. Todo el estadio coreo con mucho merecimiento su nombre. Enorme el meta del Villarreal.
A partir de ahí el partido entro en una dinámica de ida y vuelta. Los azulones adelantaron líneas en busca del empate, y los groguets bien ordenados en defensa a la espera de robar y salir a la contra para matar el encuentro.
Calleja introdujo cambios para ganar en posesión y tener más contención defensiva. Entraron Rodrigo y Fornals y se pasó a jugar con cuatro en línea. Con ello los groguets ganaron contundencia en la parcela ancha y dificultaron el juego de creación del Getafe.
De ahí al final hubo mucha emoción por el marcador y los antecedentes del Villarreal de perder puntos en los últimos minutos por no rematar los partidos, pero esta vez el Villarreal supo sufrir y acabo logrando los tres puntos en su disputa de los puestos de competición europea.
El Villarreal consiguió una victoria muy importante, tres puntos de vital importancia y más teniendo en cuenta el resultado de alguno de sus perseguidores como son Éibar y Girona. Amplia diferencia con respecto a ellos y coge aire para afrontar en los próximos siete días dos dueles trascendentales en sus aspiraciones europeas.
Esta victoria tiene nombre y apellidos, y ese no es otro que Sergio Asenjo que con su actuación se erigió en la figura del partido una vez más y no sé cuántas van. Simplemente… Don Sergio Asenjo.