En el barrio de Vallecas, como acostumbra a hacer cada tarde, se dirige al gimnasio del Rayo Vallecano a dar clases de boxeo a todo aquel que esté dispuesto a afrontar el reto. Día tras día, parece imposible separar a este madrileño nacido en Alcobendas y vallecano de adopción de un ring. Una pasión que alguno verá exagerada, pero que él lleva con total naturalidad. Ser boxeador y además español parece todo un reto hoy en día, deportistas que en gran cantidad de ocasiones, más que ganar, acaban perdiendo dinero. Mientras Manny Pacquiao y Juan Manuel Márquez negocian una revancha que catapultaría la bolsa del mexicano hasta los 20 millones de dólares, un boxeador español puede llegar a ganar alrededor de 1600 euros por combate, una diferencia evidente. 

Javi Vega dejó de ser boxeador, pero no se alejó ni un metro de las 16 cuerdas. Profesor y entrenador, así se gana la vida una persona que durante gran parte de ella ha estado peleando y sufriendo las consecuencias del boxeo. Un récord de 17 victorias y dos derrotas le acreditan como un gran peleador, con una carrera profesional de más de 7 años de duración. Parece imposible por tanto el abandonar un estilo de vida que le ha llevado a ser conocido por todo el panorama boxístico español e incluso, fuera de nuestras fronteras.

Las personas que le conocen hablan maravillas de él, como entrenador, boxeador y persona. Rubén Varón, uno de los mejores boxeadores del panorama internacional y amigo íntimo de Javi, nos hablaba en una reciente entrevista de la amistad que mantiene con él, ayudándole en cada entrenamiento para prepararse cualquier combate, confiando en el trabajo que éste realiza en cada sesión. No necesita llamar la atención ni atraer a los focos, llevar gafas de sol y participar en excéntricos reportajes que poco o nada ayudan al mundo del boxeo, para ser valorado tal y como merece.

Contaba Javier que el título que ganó a Daniel Pérez Salido en San Sebastián de los Reyes tenía un sabor especial para él, dedicándoselo a un ser querido que tristemente fallecería días después. La humanidad de un campeón que peleó en aquel combate, con el corazón dividido. Otras anécdotas, como su pelea en amateur ante uno de los mejores boxeadores de talla mundial de la actualidad, Andre Berto, en la que el resultado fue favorable al americano pese a ser un combate muy igualado como él reconocía.

Muchas pequeñas historias resumidas en un libro homenaje a su carrera que fue presentado en su ciudad natal y que recoge los mejores momentos de una persona especial para el panorama nacional de boxear. Pronto podréis disfrutar de una entrevista realizada con él tras abrirnos de par en par las puertas de su casa. Una historia que merece ser contada.