La franquicia del Estado de Michigan retirará el número 5 con el que el defensa sueco Nicklas Lidstrom ha defendido los colores rojo y blanco de los Red Wings durante veinte años.

Lidstrom llegó a Detroit en el año 1991 procedente del Västerås IK de la Liga Sueca dos años después de haber sido seleccionado con el número 53 del Draft de 1989. En su año de novato produciría un impacto inmediato en la Liga alcanzando los 60 puntos en 80 partidos y quedando en segunda posición por detrás del ruso Pavel Bure en la votación al mejor novato del año.

Pese a su juventud, Lidstrom rápidamente se afianzó en la Defensa de los todopoderosos Wings erigiendo al equipo de la Motown en una de las franquicias más importantes de la década de los 90 en las que conocería y saborearía tanto las mieles del éxito, como los duros golpes da la vida. Tras conseguir el Campeonato del Mundo de Hockey en su país natal en el año 1991, tuvo que esperar a finales de los años 90 para conseguir su primera Stanley Cup. Fueron los años de los duelos memorables contra los Colorado Avalanche, que quedarán siempre en la memoria de los amantes y seguidores del hockey, tanto por intensidad,  rivalidad e incluso violencia existente entre ambos equipos.

La primera Cup sería agridulce para Lidstrom y para toda la familia Red Wing. Corría el año 1997 y Detroit acababa de volver a ser campeón tras una espera que se alargaba ya desde 1955. Días después de alzar el Santo Grial del hockey, varios compañeros de equipo de Lidstrom, entre los que se encontraban Vladimir Konstantinov y Viacheslav Fetisov sufrían un accidente con una limusina tras sufrir un accidente después de una fiesta de celebración del título conseguido. El peor parado sería Konstantinov, un aguerrido defensa que quedaría postrado en silla de ruedas el resto de su vida debido a los daños cerebrales causados por el accidente.

La temporada siguiente volvería a ser exitosa para los Red Wings que retendrían el título de Campeones, homenajeando a Konstantinov, que en silla de ruedas, recogía la Stanley Cup en el hielo entregada por todos sus compañeros en una imágen para el recuerdo.

Lidstrom conseguiría su tercera Stanley Cup en el año 2002 y la cuarta en 2008. Además, sumaría un Oro Olímpico en las Olimpiadas de Invierno de Turin en el año 2006, convirtiéndose en uno de los jugadores que ha conseguido ganar las tres mayores competiciones del hockey mundial.

En el año 2012 y con cuarenta y dos años, Lidstrom aunciaba su retirada, dejando tras de sí unos números estratosféricos: 4 Stanley Cup, 1 Oro Olímpico, 1 Mundial de Hockey, 7 Trofeos Norris que premian al mejor defensa de la NHL – el último conseguido con 39 años -, 12 participaciones en le Partido de las Estrellas, 10 veces elegido para el mejor equipo de la NHL, más de 1.500 partidos con los Red Wings y más de 1.100 puntos. Además, Lidstrom ha sido el primer capitán de equipo europeo en levantar una Stanley Cup.

Su número 5 colgará del techo de Joe Louis Arena de Detroit al lado del de leyendas como Steve Yzerman, Gordie Howe, Ted Lindsay o Alex Delvecchio. Un merecido reconocimiento para el mejor defensa de todos los tiempos.