Los Dallas Cowboys ganaron a los Minesota Vikings en un partido que estuvo abierto hasta la última jugada. Los de Texas se ponen 5-4 y mantienen con esta victoria una tranquila primera posición de la NFC Este a pesar de ser la peor defensiva de la NFL. Los Vikings por el contrario se hunden más en la NFC Norte con 1-7 y dan por perdidas las pocas opciones que tenían. A pesar de esta derrota merecieron algo más y los pocos errores fueron decisivos.

Durante toda la primera parte los dos equipos se mostraron muy serios sin cometer a penas errores. La ofensiva de Dallas se centro durante todo el encuentro en avances aéreos. Tony Romo solo decidió hacer 9 ataques por tierra para conseguir 36 escasas yardas. El mayor peligro de los Cowboys estaba en la asociación Romo – J. Witten.

El primer touchdown del partido fue para los visitantes. Tras un drive en el que los Vikings avanzaban fácilmente, Christian Ponder vio el camino a la endzone y no se lo pensó dos veces. El quarterback vikingo volvía a su estado natal y ponía el marcador 6-10 para los suyos después de una primera parte en la que Dallas solo pudo anotar dos goles de campo.

La segunda parte comenzó realmente mal para los de Leslie Frazier que en un solo minuto encajaron dos touchdowns. El primero en un pase de 26 yardas de Romo a Witten y el segundo en una desafortunada jugada para Minesota. Ponder cometió un fumble en el safety y Nick Hayden solo tuvo que agarrar el ovoide para poner el marcador en 20-10.

Pronto espabilarían los Vikings que en el siguiente drive consiguieron un touchdown a través de un pase de 31 yardas de Ponder a Kyle Rudolph. El ala-cerrada de Ohio se lesionó en esa misma jugada y no podría volver al partido.

El encuentro llegaba abierto al último cuarto, en el que se alcanzaron los momentos de mayor tensión del partido. En la primera ofensiva vikinga, Ponder era interceptado por Orlando Scandrick en la mitad del campo y no pudo aprivechar una ofensiva que les hubiera puesto por delante del marcador

Minesota se mostró consistente y en el siguiente drive consiguieron uno de los mejores touchdowns de la tarde por parte de Adrian Peterson. El que fuera MVP del 2012 consiguió atravesar la línea rival ganando 11 yardas y a pesar de la resistencia de dos defensas de Dallas pudo poner el cuero en la zona de anotación. B. Walsh falló la conversión del punto extra que terminó costándole caro a los suyos.

En los últimos momentos del partido los Vikings se desinflaron y dejaron que Dwayne Harris anotara el touchdown que les condenaría con la derrota.

Peterson titánico

El corredor texano volvía a su estado natal pero no pudo conseguir la victoria para su equipo. Peterson fue el mejor jugador ofensivo del partido con 140 yardas en 25 carreras. Demuestra así ser uno de los mejores running back de la liga a pesar de la difícil situación personal por la que atraviesa.

Con este partido ya suma 571 yardas en la cuenta personal y se coloca como el 5º mejor corredor de la liga en esta semana 9.