El partido enfrentó a los Minnesota Vikings contra los Chicago Bears en el Mall of America Field de Minesota. Segundo duelo entre estos dos equipos de la NFC Norte en esta temporada. Los Vikings le devolvieron la moneda de la semana 2 a su rival y les da confianza a pesar de seguir últimos en su división. Por su parte los Bears suman con ésta la segunda derrota consecutiva dando margen a los Lions.

El partido empezó mal para ambos equipos que no conseguían buenos avances. Los cuatro primeros drives de Minnesota acabaron con Ponder derribado perdiendo un total de 30 yardas. La línea ofensiva de los Vikings dejó pasar fácilmente a jugadores de los Bears y Ponder no encontraba el camino para conseguir buenos avances.

Tan solo Robbie Gould pudo anotar un gol de campo de 30 yardas para Chicago. McCown realizó un drive muy inteligente con buenas elecciones de pase tanto por aire como por tierra y se ponían 0-3 en un partido que hasta el momento no estaba siendo muy vistoso.

Los Vikings se pusieron por delante del marcador con un gran touchdown de Cordarrelle Patterson. Ponder encontró a su receptor y con un pase de 33 yardas ponía el marcador en 7-3 después del punto extra. Como nota graciosa del partido, Petterson celebró el touchdown con un árbitro en un gesto amistoso extendiéndole la mano.

Justo en el siguiente drive, Gould volvió a anotar otro gol de campo pero, esta vez de 40 yardas que ponía el marcador 7-6. Los Bears no eran capaces de anotar ningún touchdown. Ambas ofensivas no estaban haciendo un partido para destacar. Poco antes del descanso Ponder tuvo que salir del campo debido a una conmoción debido a un golpe con un defensa rival.  Cassel tuvo que sustituirle durante el resto del partido.

Al descanso las cifras de la ofensiva de los Vikings estaban en un total de 123 yardas, de las cuales tan sólo 16 fueron por aire. Los avances de los locales se concentraban en las carreras imparables de Adrian Peterson que cerró un partido impecable. El corredor batió en este partido la cifra de 10.000 yardas por acarreo en toda su carrera.

La segunda mitad trajo la emoción al partido, y en el primer drive, los Bears anotaron su primer touchdown. Josh McCown lanzó un pase largo para A. Jeffrey y ponía a los suyos de nuevo por delante. Otro touchdown del receptor de Carolina del Sur y un gol de campo de los Viking  dejaban el luminoso en 10-20 para los de Chicago.

El último cuarto fue el más productivo para Minesota. Un touchdown de G. Jennings hizo que el Mall of America Field se viniera arriba. Cuando mejor parecían ir las cosas, Los Vikings llegaron hasta la yarda 6 de Chicago y en un pase de Cassel a Ellison, los Bears interceptaron a falta de una yarda. K. Greene llevó el ovoide hasta la yarda 50 dejando callado al público que ya saboreaba la victoria. Un gol de campo de Walsh, dejaban un empate a 20 con el que se llegó a la prórroga. En este mismo cuarto se vivió la jugada tonta del partido. Cuando McCown estaba siendo derribado, hizo un pase muy forzado que rebotó en las piernas de un jugador rival, el ovoide cayó en manos de un compañero suyo y éste cometió un fumble que finalmente recuperó Marvin Mitchell para Minesota.

La prórroga estuvo cargada de ocasiones claras para ambos cuadros. La primera ocasión fue para los Vikings, por medio de Walsh. El pateador anotó lo que parecía ser el gol de campo que daba la victoria a los suyos. Cuando todo el público celebraba la victoria, un pañuelo voló y los árbitros pitaron un face mask en la ofensiva. Finalmente no pudieron sumar y ahora las opciones estaban de cara para los visitantes. Gould falló su gol de campo, que se escapó por un lado y finalmente los Vikings ganaron con un gol de campo, esta vez sí, de Walsh de 34 yardas.

Peterson no conoce límites

El corredor de los Vikings cerró ayer uno de sus mejores partidos. Superó las 10.000 yardas por acarreos en toda su carrera. En lo referente al encuentro de anoche, consiguió la vertiginosa cifra de 211 yardas en un total de 35 carreras. Peterson fue una pesadilla para la defensa de los Bears que en muchas ocasiones no podían pararle ni con 3 jugadores encima. Con el partido de ayer se pone como el corredor con más yardas por tierra, 1208 y se escapa de sus rivales.