“Ha vencido el 1%. Pensaba en dejarlo, pero, como siempre, todos me convencéis y sigo adelante. Sería un sueño poder dejar al Cartagena en Primera División”. Con estas declaraciones hizo oficial el santanderino de 42 años Javi Matía su extensión de contrato por un año más en Cartagena, el decimosexto en tierras portuarias.

No podía comenzar mejor la temporada para el veterano cierre, quien anotó el gol de la victoria en la primera jornada de Liga frente al Cidade de Narón a falta de dos minutos para el final del partido, y dio una asistencia espectacular al segundo palo desde banda derecha en el siguiente choque contra Canarias. Los isleños también serían afectados por el olfato goleador de Matía en el partido de vuelta que, sumados a los dos que marcó a Puertollano, otro más a Narón y uno al Betis, le han hecho sumar un total de seis goles esta campaña. De todos es sabido que Javi es un jugador muy querido por toda la afición cartagenera, hay una conexión especial jugador-afición incuestionable y en muchas ocasiones lo ha expresado públicamente: “El público nunca falla, siempre lo he dicho. Hasta en los entrenamientos siempre hay algún aficionado. Son un diez”.

Lo que Javi Matía ha aportado esta campaña a Plásticos Romero Cartagena se puede resumir en una palabra: profesionalidad. El cierre ha sido pieza fundamental tanto dentro como fuera de la cancha. Sus compañeros se deshacen en halagos hacia el cántabro. “Se puede aprender todo y más con lo que él lleva en sus botas y sobre todo en su mente. Pero lo que yo más alabo de él es que es un profesional como la copa de un pino y que tenga la edad que tenga y aunque haya compañeros a los que doble en edad, nunca se rinde, siempre entrena al máximo”. “Me encanta jugar con él en la pista porque el balón siempre me va al pie, siempre que levanto la cabeza, él me busca y me la manda directa al pie”, expresaba Elián.

El respeto y compañerismo que enfundan todos los jugadores de la plantilla con Javi demuestran que el prestigio del jugador es bien merecido. Especialista en dobles penaltis, esta temporada también lo ha demostrado en varias ocasiones: donde pone el ojo, pone el  balón. Otra de sus facetas ha sido la de portero-jugador, como se le ha visto en aquellos partidos que se pusieron cuesta arriba y fue Javi el que salió de cinco para mover el balón lo más preciso posible y generar el máximo peligro al rival, como ocurrió frente al filial blaugrana en ‘La Bombonera’.

 Javi Matía ha tenido muy claro que si continuaba una temporada más sería para devolver a Cartagena a la élite del fútbol sala español: “Quiero conseguir lo máximo y quiero que el equipo esté en Primera. Tengo clarísimo de que va a ser mi último año y quiero ascender”.

Pues bien, quien la sigue la consigue y Javier Matía lo ha conseguido. Cartagena vuelve al sitio de donde nunca tuvo que irse.