Tras perder dos partidos consecutivos -ante Ademar en Liga y Anaitasuna en la Copa del Rey-, el Naturhouse estaba obligado a ganar para no poner en peligro la consecución del segundo puesto, pero los riojanos no se quisieron conformar con los dos puntos. Con una exhibición defensiva que se tradujo en una infinidad de contraataques, el Natur no tardó en echar por tierra la resistencia arandina -el resultado al descanso ya era de 24 a 12-. Al final, el Villa de Aranda acabó pagando los platos rotos y los franjivino acabaron dándose un baño de goles.

Con este resultado el equipo de Jota González da un golpe encima de la mesa y ya acaricia la consecución de su principal objetivo: la segunda plaza de la Liga BAUHAUS ASOBAL. De hecho, si el Ademar cae derrotado en su visita al Palau Blaugrana, el subcampeonato pertenecerá matemáticamente al Naturhouse. Por su parte, el Villa de Aranda dice adiós definitivamente al cuarto puesto y con él a competir en Europa la próxima campaña.

Los arandinos solo pudieron resistir veinte minutos

El Natur comenzó el partido muy enchufado, con las ideas muy claras en ataque, y no tardó en cobrar la primera renta del choque (3-1, min.5) gracias a la aportación de Langaro y Garciandía. Jacobo Cuétara vio tan perdidos a los suyos que no dudó en pedir tiempo muerto al poco de comenzar el encuentro (4-1, min.7). Tras el parón, el Villa de Aranda consiguió meterse en el partido y, aprovechando una exclusión local, redujo la diferencia a la mínima expresión (6-5, min.11).

Sin embargo, el equipo riojano solo dio una pequeña tregua a los ribereños, pues a partir del minuto veinte (13-10), los franjivino maniataron a los visitantes. Kappelin se entonó y Víctor Vigo electrizó las transiciones de los suyos, para delicia de los extremos. Cuétara trató de cortar la sangría con otro tiempo muerto, pero en cuestión de minutos el Natur endosó un parcial de 8-1 (21-11, min.28). El 24 a 12 con el que se llegó al descanso dejaba poco margen a la imaginación.

Festín franjivino

En la segunda parte el Villa de Aranda lo intentó todo, pero los aires de remontada no pasaron de un parcial de 1-3 de salida (25-15, min.34). A partir de ahí, el Natur volvió a apretar en defensa y varios contraataques terminaron de sepultar al conjunto arandino (31-17, min.42). La renta no paraba de crecer y Jota González dio descanso a su equipo titular para acabar jugando con Miguel Sánchez de central. El Natur se sentía cómodo en la pista y los goles se sucedían. Alberto Val se hizo el dueño de la línea de los seis metros y protagonizó el ataque franjivino, aunque Langaro tampoco se quedó atrás.

Con el partido decidido, ambos equipos entraron en una dinámica de intercambio de goles, algo que el Palacio agradeció. El joven Cadarso, que anotó dos goles, cogió la batuta de su equipo y dio dos asistencias a Val que maravillaron a la afición riojana. El resultado final de 40 a 27 supone un récord para el Natur de anotación en la Liga BAUHAUS ASOBAL.

De esta manera, el Villa de Aranda tendrá que conformarse con luchar por un quinto puesto que se quedará sin premio después de que el Anaitasuna se hiciera con la última plaza para la Copa EHF en la Copa del Rey. Por su parte, el Naturhouse acaricia la consecución de la segunda plaza y afrontará sin presión el último tramo de la competición.

Próxima jornada

La semana que viene, el Naturhouse recibirá a un Granollers que se está disputando con el Ademar la tercera plaza de la tabla y que hasta hace bien poco era el máximo perseguidor de los riojanos. Por su parte, el Villa de Aranda ejercerá de local ante el todopoderoso FC Barcelona.