La crueldad parece haberse cebado con el Bodegas Juan Gil Jumilla. Una vez superados los problemas económicos de principio de temporada, han aparecido nuevas adversidades en forma de lesiones.

Los murcianos ya disputaron la jornada pasada toda la segunda parte sin cambios y esta, se presentaron en cuadro en Tudela, con solo siete jugadores de campo, debido a las bajas de Lineker, Samuel e Iván. El conjunto de Gea luchó contra viento y marea y, aunque acabó goleado, cayó con la cabeza muy alta. 

Javi Mínguez y Molina entierran las opciones de sorpresa en la primera mitad

Conociendo las limitaciones del rival, Pato planteó un partido muy físico desde el principio, con una presión asfixiante en toda la pista, que ahogó durante buena parte de la primera mitad al Jumilla. Los de Gea tuvieron que recurrir al pelotazo en largo para desprenderse de la presión navarra. Los locales llevaron la manija y la iniciativa del choque, ante un rival que aguardaba atrás a la espera de cazar alguna contra que les acercara a la meta de Molina. La insistencia local tuvo sus frutos en el minuto 7, cuando Mínguez estrenó el marcador.

Gea reaccionó rápido e intentó pausar el partido sacando portero-jugador pero los navarros no se achicaron y siguieron mordiendo arriba. Así, de nuevo Mínguez anotaba a portería vacía tras un robo de balón. El joven ala remató su gran actuación un minuto después con un nuevo tanto. 

Molina impidió que Jumilla se metiera en el partido con grandes paradas

Con el 3-0 en el marcador, los hombres de Pato bajaron una marcha en su juego y Jumilla comenzó a asomarse con peligro a la meta defendida por Molina. Bolívar, que fue el mejor de su equipo, y Everton condujeron las ofensivas de su equipo pero todos los balones se estrellaron en el muro aragonés, infranqueable una jornada más

Los problemas se acumulan en la segunda parte

Si algo puede ir mal, entonces irá mal, dice la Ley de Murphy. La teoría del ingeniero estadounidense se está cumpliendo a la perfección con Jumilla, que en la segunda parte vio como Everton también caía lesionado. Gea, que ya había utilizado al guardameta Luque en el juego de cinco, le hizo vestirse de campo y que abandonara la portería para ayudar en las rotaciones a sus compañeros. 

El guion de la segunda mitad fue calcado al de la primera parte. Jumilla esperó atrás y utilizó portero-jugador para lanzar sus ataques, aunque no hubo manera de perforar la meta navarra. La falta de gol no fue un problema para el conjunto entrenado por Pato, que redondeó la goleada con goles de Luisma y Lucas

La permanencia se complica, el playoff aún es posible

Si la situación en la tabla era complicada antes del partido, tras la derrota aún se ha teñido más de negro el futuro en Primera División para Jumilla. Levante es quien marca ahora el descenso y se encuentra a 10 puntos con tan solo cinco jornadas por disputarse.

Ribera Navarra, por su parte, aún mantiene vivas las esperanzas del playoff. Catgas ocupa la octava plaza y está a siete puntos de distancia. Los hombres de Pato tienen cinco partidos para adelantar a los catalanes y luchar, una temporada más, por el título de Liga

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