Antonio Ramiro Romo o como el mundo lo conocía: Tony Romo, la imagen de los Dallas Cowboys, el Quarterback franquicia del equipo oriundo de Texas, el mariscal de campo que Jerry Jones, dueño de los Vaqueros, pensaba que sería el indicado para terminar con una sequía ya de 22 años sin poder alzar el trofeo Vince Lombardi, este martes anunció su retiro.

Algunos fanáticos de la NFL lo vieron como un QB de grandes cualidades, talentoso; un jugador de élite que nada tendría que pedirle a mariscales como Tom Brady, Aaron Rodgers u otros simbólicos como Joe Montana y Dan Marino; otros, lo veían como un jugador con algo de suerte, que brillaba en varios partidos, pero que, cuando más era necesitado, "se hacía chico" por lo cual no merecía (o merece) ser incluido en la lista de los más grandes porque simplemente "no logró un anillo de Super Bowl".

En su carrera Antonio Ramiro puede presumir haber asistido a la Universidad del Este de Illinois, puede sacar a relucir ser segundo pases completados en la División I-AA con 164 de 278 pases para dos mil 583 yardas y 27 touchdowns.

La leyenda con el dorsal 9 de los Vaqueros llegó la 'franquicia más cara del mundo' en el año 2003 como agente libre, yendo poco a poco hasta lograr ser el QB suplente, esto gracias a la larga lista de mariscales de campo que no pudieron brillar en Dallas tales como: Vinny Testaverde, Quincy Carter, Chad Hutchinson, Drew Henson (que brilló más como beisbolista) y el afamado Drew Bledsoe, éste último ya cargaba con los dichos de tener un aprendiz de excelentes cualidades y que hoy en día es una de las máximas leyendas en la historia de la NFL: Tom Brady.

Sería hasta el año 2006 cuando Romo recibiría su primera oportunidad de manejar los hilos del ataque de los Vaqueros como titular, logrando que fuera seleccionado para el Pro Bowl de ese año. También daría mucho de que hablar luego del gol de campo fallido ante los Seattle Seahawks en el juego de comodín de esa temporada. Tony además de ser el QB titular también jugaba como Holder, soltando el balón tras el snap y aunque alcanzó a recuperarlo para intentar una carrera hacia el touchdown, fue detenido y en la caída soltó el balón, considerando esta jugada como una de las peores en la historia de la NFL.

La temporada 2007 fue, quizás, una de las mejores que ha tenido, donde rebasó las cuatro mil yardas, sin embargo en el juego divisional lo perdería Dallas con una intercepción de los Giants.

El año 2008 sería una dura prueba, obteniendo una marca 9-7, siendo derrotados en el último juego del Texas Stadium ante los Baltimore Ravens, así como una derrota ante los Eagles, la cual los marginaría de entrar a los playoffs.

La primer victoria en playoffs llegaría en 2009 cuando derrotaron a Eagles, sin embargo en la siguiente ronda los Vikings eliminarían a Dallas con una actuación pésima por parte del QB, comenzando a ser cuestionado por lo de siempre: no saber hacer frente en los juegos realmente importantes.

Su primer lesión llegaría en 2010 cuando se fracturaría la clavícula, lesión que lo dejaría tocado años después; en esa misma temporada tampoco ingresaron a las rondas finales. En 2011 nuevamente estaría tocado, ahora con una lesión en la mano que lo marginó en la recta final de la temporada, perdiendo nuevamente los Vaqueros la posibilidad de disputar por el Vince Lombardi.

La gente se cansaba, ya no estaba a gusto con el jugador de raíces mexicanas; 2012 y 2013 serían dos años catastróficos para la franquicia y para Romo donde no clasificaron a playoffs, donde se daba polémica de un contrato de 6 años que le entregaba Jerry Jones a Antonio Ramiro y donde los fanáticos de los Boyz abuchearon tanto al dueño como a su mariscal en un partido ante los Giants. Para el colmo, Tony sería diagnosticado con una hernia de disco, por lo cual no culminaría otra temporada.

Llegaría el año 2014, y con él se abriría una nueva luz de esperanza, donde los Vaqueros regresarían a playoffs, ganando el Wild Card a los Lions de Detroit, pero siendo nuevamente eliminados en el juego divisional ante los Green Bay Packers.

2015 y 2016 serían los años del declive, una nueva lesión marginaría a Romo sufriendo una fractura de la clavícula izquierda en la segunda semana de la temporada, frente a las Philadelphia Eagles, quedando fuera de acción. Regresó para la semana 11 con una victoria de Cowboys sobre Miami Dolphins, pero para la semana 12, en el partido contra Carolina Panthers, tiraría tres intercepciones y sufrió nuevamente una fractura de la misma clavícula. Esta lesión lo dejó fuera el resto de la temporada.

Un año después y cuando todos pensaban que era el ahora o nunca para el 9, volvería a lesionarse de la clavícula en el juego de pretemporada ante los Seattle Seahawks, volviendo hasta la semana 13 ante los Cleveland Browns, pero como suplente del novato Dak Prescott, con quien perdería la titularidad y solo participando en una serie ofensiva en la última semana ante los Eagles, donde brindó un pase de touchdown, el último de su carrera.

Romo es líder histórico en yardas de Dallas Cowboys con 34 mil 183; logró 248 pases de TD en 13 temporadas; fue seleccionado 4 veces al Pro Bowl.