La semana 12 de la NFL dejó varias cosas, partidos sorprendentes, algunas lesiones, pero la última jornada fue manchada por la violencia, una vez más. En el partido entre Denver Broncos y Oakland Raiders, donde el cornerback Aqib Talib y el wide receiver Michael Crabtree, protagonizaron una pelea a golpes. Cabe resaltar que no es la primera vez que ambos jugadores se encuentran las caras de esta forma.

La temporada pasada, el jugador de los Broncos, Aqib Talib, arrancó la cadena de M. Crabtree, algo que no le gustó al wide receiver y contestó de forma agresiva; en este partido el jugador de los Raiders continuó con esta novela y durante el partido hubo algunos roces notorios, que terminaron en la riña que dejó a un juez, que intentaba parar la pela, lesionado. Ambos jugadores fueron expulsados del encuentro cuando quedaba en el reloj 11 minutos del segundo periodo.

El tema de las sanciones se ha tocado en los últimos años con casos como el de Ezekiel Elliot, Josh Gordon y Paul Hornung, entre otros. Sin embargo, bien lo mencionó hace tiempo Santiago Tomasi, la NFL ha pasado a ser un juez único por lo que deja a un lado a la justicia ordinaria que tome ciertas decisiones. 

En los últimos días, se habló de la suspensión que recibieron ambos jugadores, al principio era de dos partidos para cada uno, por lo que pasaría a la historia como una de las sanciones más duras. Sin embargo, quedó demostrado lo laxo que pueden llegar a ser las decisiones que toma la NFL, al bajar el castigo a solo un partido.

Hay que retomar las ideas que Juan Andrade plasmó hace tiempo en “Sanciones, la solución para frenar la violencia”, la NFL pasa a ser una institución a seguir, el deporte es centro de atención para muchas personas y lo que llega a pasar dentro de los estadios puede repercutir en la sociedad. Al final del camino, los administrativos de la institución tienen que tratar quirúrgicamente diversos temas, a pesar de que proyectar una buena imagen al exterior y al ser un punto de atención, donde tendrán los reflectores puestos constantemente, al mínimo error se viene todo encima.

En dicho artículo se comentó sobre qué tan importante son las sanciones dentro del fútbol americano, en donde se tiene que cuidar tanto lo que pasa dentro del emparrillado como fuera. Las sanciones pasan a formar parte de la imagen de la institución, es por eso que el tema de Elliot pasa a ser tan trillado; pero en este caso en el choque entre Crabtree y Aqib Talib, pasa a encender los focos rojos. No es posible que den una sanción fuerte y a los pocos días cambien la decisión.

Durante el mandato de Barack Obama como presidente de los Estados Unidos, se habló mucho del tema de la violencia y el fútbol americano, algo que llevó al expresidente a dejarlos en el mismo bloque. Con este tipo de decisiones, deja ver a la NFL como una institución laxa respecto a las sanciones, aunque hayan hecho bien con los casos mencionados anteriormente, todo cambia después de esta semana.

Hablar de sanciones tanto en la NFL como en todos los deportes es un tema delicado, sin embargo los jugadores que son imagen y personas a seguir por muchos fanáticos deben de dar muestra de que son diferentes. Tanto dueños, estrategas y jugadores deben de ser sancionados con la delicadeza que debería de ser, no se puede pasar de alto a temas como estos, deberá de haber una retroalimentación respecto a las sanciones. ¿Están funcionando? El caso vivido el pasado domingo nos está dando una respuesta negativa.