Hemos entrado al mes de diciembre, donde los equipos en la NFL comienzan a mostrar su mejor nivel, buscando entrar a la postemporada y asegurar tener actividad en el siguiente año por la búsqueda del trofeo Vince Lombardi. Siempre el debate en estas semanas es para conocer quién será el jugado más valioso, pero nosotros nos enfocaremos en analizar quién es el regreso del año. Este premio se entrega a aquel jugador que no tuvo buena participación en 2016, pero en 2017 retomó su nivel. Ahora repasaremos a cinco candidatos que están peleando por la condecoración que se entrega en la semana del Super Bowl.
Rob Gronkowski - New England Patriots
Por expertos en la materia, Rob Gronkowski es considerado el mejor ala cerrado de los últimos años en toda la liga, demostrándolo con sus números y además sus campeonato. Lo único que lo frena son constantes lesiones, que en 2016 lo privaron a media campaña de concluirla.
Actualmente, sigue siendo el receptor favorito de Tom Brady, acumula 702 yardas en recepción junto a siete pases de anotación que le ha lanzado Brady. A estas alturas del año pasado, ya se encontraba fuera lo que restaba del año. Si sigue con este mismo paso, podrá llegar a 15 anotaciones y rebasar las 1000 yardas.
Sammy Watkins - Los Ángeles Rams
Después del cambio que tuvo de Buffalo a Los Ángeles, Watkins ha mejorada una enormidad. En este punto de la liga, ya igualó los números que hizo el año pasado jugando con los Bills. Ahora con un equipo en gran momento como los Rams, Watkins con los cinco pases de Touchdown y 490 yardas recibidas es una arma de gran ayuda para Jared Goff.
Earl Thomas - Seattle Seahawks
Único defensivo en este conteo, uno de los miembros de The Legion of Boom que se ha mantenido sano a pesar de tantas lesiones. El safety es el nuevo líder de esta defensiva que quiere mantener en la pelea a los Seahawks. Ha anotado en una ocasión de seis puntos y lleva 32 tackleadas, pero es el jugador más rezagado en este conteo, debido a que los Halcones Marinos han ido a menos dados tantos jugadores que han tenido con bajas.
Todd Gurley - Los Ángeles Rams
Es uno de los candidatos más fuertes por tanto contraste de su segundo a tercer año como profesional. El primer año para Gurley fue espectacular, pero cayó en hibernación para el segundo. Ahora solo le faltan 20 yardas para superar lo del 2016 y a dos anotaciones de superar lo de su año debut. Sin duda alguna, lo que ha ayudado a Gurley a explotar de esta forma es el Head Coach: Sean McVay que volvió a Todd un referente del equipo y retomar el ataque terrestre como una arma de suma importancia.
Case Keenum - Minnesota Vikings
Ni su propio equipo lo veía como protagonista en esta temporada, pero dadas las lesiones de Bradford y Bridgewater, Case Keenum ha sido el protagonista de esta franquicia en la zona ofensiva junto al receptor Adam Thielen. Desde que llegó a 2013 a la NFL con Houston, este es su mejor año profesional con 300 yardas de ventaja del año pasado y cinco pases de anotación.
