Bada Huesca tomó un paso de ventaja en la eliminatoria tras vencer en su cancha por 33-28 a un Ángel Ximénez Avia Puente Genil que logró acercarse en los minutos finales y aumentar sus opciones de remontada en la vuelta del próximo miércoles.

El choque arrancaba igualado entre ambos conjuntos. Los cordobeses alcanzaban su primera y única ventaja del partido con el 2-3 del minuto 5. Con un tira y afloja llegaron a la mitad de la primera parte con ventaja mínima local (7-6 minuto 15). Los de Julián Ruíz se mostraban más seguros en defensa que en ataque, pero sus prestaciones atrás no eran suficientes para mantenerle la cara al partido y el Bada Huesca remató la primera parte con un parcial 4-1 que los llevó al descanso con la máxima ventaja en el transcurso del partido hasta el momento, 15-11.

La reacción visitante fue contenida por los goles de Teixeira, sin embargo, Puente Genil logró reducir la diferencia. Mediada la segunda parte con 22-20 en el electrónico, Julián Ruíz se la jugó atacando una inferioridad sin portero y sufrió dos goles rápidos que iniciaron el arreón de los oscenses. La diferencia se ampliaba a los 8 tantos (29-21). Huesca encontraba a Gonzalo Carró con facilidad en la línea y Carmona (máximo goleador del partido) los castigaba desde la esquina derecha. En los últimos minutos los visitantes propusieron un cambio defensivo, aumentando la profundidad de sus jugadores. Gracias a esta defensa y al acierto de Tomás Moreira y Almeida, la reacción final logró apretar el tanteo y cerrar el partido con el 33-28 que deja abierta la puerta a la remontada en la cancha cordobesa.

La diferencia está en el límite para no perder la esperanza

A la conclusión del encuentro, el técnico local José Nolasco consideraba acerca de la ventaja para la vuelta que “la mejor forma de que estos cinco goles valgan es ir a ganar el partido”. Con respecto a la reacción final de Puente Genil declaraba que “el cambio defensivo nos ha cogido un poro a contrapie y aunque estaba entrenado es lo que más daño nos ha hecho”.

Por su parte, Julián Ruíz destacaba de su rival que “han penalizado muy bien nuestros errores; sabíamos que Huesca tenía un muy buen contraataque y así lo han demostrado”. Sobre su equipo comentaba que “he visto al equipo irregular en la primera parte en todos los aspectos y nos han penalizado mucho las pérdidas de balón; algunas gracias a las acciones defensivas del rival, otras por errores infantiles nuestros”.

La diferencia de cinco goles supone una ventaja a la vez cómoda y peligrosa para el Bada Huesca. “Está justo en el límite para no perder la esperanza sabiendo que es complicado”, aclaraba el entrenador de Puente Genil.