Jaromir Jagr no está centrado en su regreso a la NHL. ''Francamente, no busqué nada. Lo único que ponerme en forma y que sea lo más rápido posible'', así se expresaba el checo tras el entrenamiento con el Rytiri Kladno, un equipo profesional que el mismo Jagr posee.

El extremo, que jugó con los Calgary Flames la temporada pasada, es ahora mismo agente libre sin restricciones. Una grave lesión de rodilla y la avanza edad que tiene han obligado a Jagr a reducir sus ambiciones.

''Mi único objetivo por ahora es sentirme mejor mañana de lo que me sentía hoy y convertirlo en un progreso de día a día. De esa manera, con suerte pueda llegar al lugar de sentirme genial algún día'', dijo el propio Jagr.

Jagr tuvo esperanzas de regresar, como muy tarde en abril, a la NHL durante su temporada 25.

Hizo siete puntos (un gol y seis asistencias) en los 22 partidos que jugó el curso pasado con los Calgary Flames y jugó su último choque ante los Chicago Blackhawks el 31 de diciembre de 2017. Después fue colocado en la reserva de lesionados y más tarde los Flames renunciaron a su ficha el 28 de enero. Sin ser reclamada por Jagr, el jugador se fue al Kladno.

Jagr, uno de los históricos de la NHL

Los 1.921 puntos de Jagr se sitúan en segundo lugar en la historia de la NHL, solo por detrás de los 2.857 de Wayne Gretzky. Sus 766 goles son terceros, tras los 894 de Gretzky y los 801 de Gordie Howe. Los 1.733 partidos que ha disputado en la liga están en tercera posición por detrás de los 1.767 de de Howe y los 1.756 de Mark Messier.

Jagr ganó la Stanley Cup dos veces en 1991 y 1992 con los Pittsburgh Penguins, el Trofeo Hart en 1999, el Art Ross en cinco ocasiones; en 1995 y entre 1998 y 2001 y, el Trofeo Masterton por su perseverancia y dedicación al hockey en 2016. Además, fue nombrado uno de los 100 mejores jugadores de la NHL según Molson Canadian.

''No debería compararme con hace diez, o incluso hace  años años. El tiempo vuela. Pero haré todo lo que pueda para seguir jugando'', afirmaba Jagr.

''Mi mayor límite es la edad. Hay cosas que me gustaría poder hacer, pero ya no puedo. A mi edad estas limitaciones vienen cada vez más a menudo. Pero creo que cuando mi pierna y todo mi cuerpo se fortalezca, todo se pondrá mejor'', decía el propio jugador.

Si Jagr juega la próxima temporada, probablemente sea en el Kladno, el equipo de su ciudad natal, el cual él es el dueño mayoritario desde 2011. La temporada 2018/19 arrancará para el Kladno el próximo el próximo 8 de septiembre.

''Creo que puedo llevar mi cuerpo a un estado de poder jugar antes de que comience la temporada. Al menos ese es mi plan'', dijo Jagr. ''No quiero pensar demasiado en el futuro. La pregunta sobre si puedo jugar aun está ahí. Veremos que sucede en estos dos meses''.