Los Pittsburgh Penguins continúan perfilando la nueva plantilla de la temporada 2018-2019 que les vuelva a llevar a la disputa de la Stanley Cup. Tras diversas renovaciones y reforzar la defensa con la firma del Agente Libre Jack Johnson, parece que desde los despachos de la franquicia de Pittsburgh se han centrado en apuntalar la posición del centro del ataque. Aglutinando un total de seis jugadores con contrato NHL que juegan en esa posición para las cuatro líneas ofensivas.
Firma de Derek Grant
La semana pasada los Pens firmaron al Agente Libre Derek Grant por una temporada. Grant de 28 años juega en la posición de delantero centro, en toda su carrera, desde que dio el salto a la NHL, en 86 partidos solo había conseguido siete puntos. Todos estos puntos eran procedentes de asistencias desde la cuarta línea y dando profundidad en los Ottawa Senators, Calgary Flames, Buffalo Sabres y Nashville Predators. Pero la pasada temporada recibió más protagonismo en los Anaheim Ducks tras la plaga de lesiones sufridas en el equipo de California en el centro del ataque, logrando acumular en 66 partidos 24 puntos (12 goles, 12 asistencias) que hizo que los Pens se fijasen en él y le acabasen firmando en esta Offseason.
¿Por qué llamó la atención la firma de Grant?
A pesar de que la firma de Grant no se trata de una firma importante, si que llamó la atención a propios y extraños su firma dada la configuración de la plantilla de los Pens, por el número de jugadores que ya poseían en la posición de delantero centro. El jugador canadiense llegaba tras firmar unas semanas antes al veterano centro Matt Cullen, que regresó a Pittsburgh tras su paso por Minnesota, tras renovar al Agente Libre Restringido Riley Sheahan y que se unen a Derick Brassard, adquirido en el Trade Deadline de la pasada temporada para la tercera línea y a las dos estrellas del equipo Sidney Crosby y Evgeni Malkin. Pero claro las cuentas no salen, seis centros con contrato NHL para cuatro líneas de ataque…
Ya el Manager General Jim Rutherford avisó que se iba a buscar mayor profundidad en el equipo tras sufrir la eliminación en la segunda ronda de Playoffs la pasada temporada. Y es que los Pens le tocó lidiar con las bajas en la Offseason 2017-2018 de Nick Bonino y el propio Cullen en la Agencia Libre, comenzando la temporada en el ataque con jugadores como Carter Rowney y Greg McKegg quizás antes de tiempo para dar el salto definitivo a la NHL. Por ello parece que con el regreso de Cullen y la llegada Grant, Rutherford ha logrado la profundidad que buscaba.
¿Cómo encajar las seis piezas en cuatro puestos?
Ante tal situación de exceso de centros en el ataque de los Penguins, Mike Sullivan tendrá que manejar varias opciones para encajar las piezas, entre ellas encontramos algunas de las que podría tantear el entrenador estadounidense:
· Desplazar centros a los extremos: Tanto Cullen como Grant serán descartados en varias convocatorias a lo largo de la temporada, pero además sería lógico que alguno de ellos fuese desplazado a una de las alas de la cuarta línea del ataque.
Otra opción podría ser incluir a Derick Brassard en el ala izquierda de alguna de las dos primeras líneas del ataque, a pesar de que no ser el fin de su fichaje el pasado año. Ya que con la llegada del canadiense, el equipo de Pittsburgh buscó tener tres centros potentes para reforzar el ataque. Y es que Brassard despliega su mejor juego en el centro, por lo que desplazarle al ala izquierda obligaría a incluir a Cullen o Grant en el centro de la tercera línea y el rendimiento de la misma bajaría en relación al juego que puede realizar Brassard.
El problema de desplazar a uno de los centros al ala, es que el equipo ya posee muchos extremos. Destacan Phil Kessel, Jake Guentzel y Patrick Hornqvist, un escalón por debajo estarían Bryan Rust, Carl Hagelin, el recién adquirido Agente Libre Jimmy Hayes [jugador potencial de la American Hockey League (AHL)] y los jóvenes Daniel Sprong, Dominik Simon y Zach Aston-Reese. Por lo que desplazar a un centro al ala del ataque podría conllevar el descarte para diversos partidos de alguno de los jugadores que juegan en los extremos o cortar la progresión de algunos jóvenes, obligándoles a regresar a la AHL.
· Realizar algún intercambio de jugadores: Sería una de las opciones para solucionar el exceso de delanteros centros. Teniendo en cuenta que Crosby y Malkin son intocables y que Grant y Cullen acaban de firmar, solo podría existir la opción de un posible traspaso de Sheahan o Brassard. Siendo Brassard el mejor colocado llegado el caso debido al valor que tiene para realizar un traspaso, el que posee el contrato de mayor montante económico y que aliviaría el tope salarial de los Pens, algo que precisamente no es abundante. Pero claro, un hipotético traspaso del canadiense pondría en duda su fichaje en el mercado de traspasos de la temporada pasada y que en ningún caso recuperarían el valor invertido entonces. Por lo que el valor de Brassard jugando en el centro del ataque es mayor para el euqipo, del que reportaría desplazándole a un extremo o en un traspaso.
· Mantener profundidad para afrontar las lesiones e imprevistos: Es una de las mejores opciones mantener una buena profundidad en la plantilla, ya que las lesiones por desgracia es algo que irá llegando a lo largo de la temporada, así como podría algún tipo de sanción imprevista. Malkin solo ha jugado más de 70 partidos en una misma temporada dos veces en las últimas nueve, Cullen tiene 42 años y se desconoce el rendimiento de Grant más allá de lo visto la pasada temporada en los Ducks. Por lo que quizás en este caso el exceso de delanteros centros se pueda resolver por sí mismo con el devenir de los acontecimientos.
Problema que se puede convertir en solución
Donde a día de hoy puede parecer que existe un problema por exceso de delanteros centros, quizás conforme avance la temporada sea la solución según vayan apareciendo las adversidades. Con lo que se acabarían por acoplar todas las piezas del puzzle por sí mismas, evitando así comenzar la temporada con solo dos centros de calidad, como ocurrió la pasada temporada, y que les acabó pasando factura a los Pens. Uno de los errores que se le achacó la pasada Offseason a Rutherford y que no dudó en reconocer e intentar corregir. Por ello no parece que vaya a volver a suceder lo mismo esta temporada, gracias a la buena profundidad adquirida con los seis delanteros centros con los que cuenta a día de hoy la franquicia de Pittsburgh.