Atlanta (1-4) recibió a los Tampa Bay Buccaneers (2-2) con la obligación de cortar una racha de tres caídas consecutivas. Una nueva derrota podía significar el final de temporada de un equipo que se preparó para ser protagonista principal de la NFL. Por su parte, los bucs llegaban al juego luego una semana de descanso y con la confirmación de Jameis Winston como quarterback titular, dejando sentado en la banca a Fitzpatrick.

Arranque letal de los Falcons

La primera mitad iba a favorecer por completo a los Falcons a pesar que los primeros en anotar puntos en el juego serían los Buccaneers. Una corrida por el centro de Barber dejó de manera temprana a los Buccaneers en la yarda 31 de Atlanta. Finalmente, el ala cerrada Cameron Brate anotó tras un gran pase a la esquina izquierda de Winston. Chandler Catanzaro iba a desperdiciar el punto extra y el juego quedaba 6-0.

Matt Ryan iba a responder de manera inmediata. Dos envíos a Calvin Ridley los ubicó más allá de medio campo y Mohamed Sanu igualó el juego con una recepción para 35 yardas. Matt Bryant convirtió el punto extra y los Falcons pasaron al frente por la mínima. Además, un tres y fuera de los bucs le daría la chance de aumentar la diferencia. Ridley iba a llegar a medio campo tras un pase enorme de Ryan y Tevin Coleman se escapó a zona roja con un acarreo muy productivo. Luego, el novato Ito Smith se filtró por el centro y anotó su tercer touchdown de la campaña.

Winston no estuvo fino en sus envíos y Tampa tuvo que despejar por segunda vez consecutiva. Una jugada explosiva de Julio Jones iba a dejar a su equipo en la yarda 9 de Tampa. Matt Ryan conectó con su ala cerrada Austin Hooper para la anotación y el partido quedó 21-6. Fue un gran comienzo de la ofensiva local aprovechando todas las dudas de una defensiva que llegaba al juego como una de las peores en yardas permitidas.

Austin Hooper anota y Sanu festeja (Imagen: Falcons.com)
Austin Hooper anota y Sanu festeja (Imagen: Falcons.com)

Con buena posición de campo, Mike Evans logró una recepción importante para quedar en red zone y O.J. Howard marcó el touchdown que le permitió a Tampa descontar en el marcador. Sin embargo, la defensiva no hacia pie en el juego y con 26 segundos le permitió a los Falcons avanzar en el campo y acercarle el balón a Bryant para un gol de campo de 45 yardas.

Tampa reacciona y se acerca

En la segunda mitad, la defensiva de Tampa Bay ajustó y la ofensiva de los Falcons no logró avanzar en el campo. Tras el despeje, un bombazo de Winston a Adam Humphries los dejó en la yarda 2 de Atlanta. Sin embargo, el quarterback iba a fallar y fue interceptado por Brian Poole cuando buscaba en zona de anotación a Godwin.

Dos largas recepciones de O.J. Howard volvió a colocar a los Bucs en zona roja pero la defensiva logró llegarle al quarterback y tras la captura se tuvieron que conformar con el gol de campo de Catanzaro. Matt Ryan sufrió la ausencia de Ridley, que no volvió al juego tras una lesión y Atlanta volvió a despejar. Los acarreos de Barber y los movimientos de DeSean Jackson no podían ser descifrados por la defensiva local y Tampa llegó a la anotación por medio de Godwin. Winston se jugó a igualar el juego pero la conversión extra no fue exitosa.

Final apretado

Atlanta reaccionó y gracias a la dupla Ryan-Jones logró la mejor serie ofensiva de la segunda parte. Tras un engaño por tierra, Ryan conectó con su corredor Tevin Coleman y volvió a tomar distancia. Sin embargo, la defensiva de los Falcons dejó en claro su pésimo presente y no podía frenar a una ofensiva que contó con varias armas para lastimar. Peyton Barber quedó sin marca y aprovechó un envió de Winston para dejar el juego 31-29 a favor del local.

A los Falcons volvía a complicarse un juego que tenía controlado y los nervios jugaban su papel. Un touchdown hubiese liquidado el juego pero como sucedió en juegos anteriores, la ofensiva perdonó y a pesar de un gol de campo de 57 yardas de Bryant, dejaba el juego en manos de la defensiva. Con menos de 1 minuto por jugar, Tampa estuvo muy cerca de ganar el juego. Winston acarreó por el medio y en la yarda 9 de los Falcons soltó el balón, Mike Evans lo recuperó sin tiempo en el reloj e intentó un pase lateral hacia la esquina donde se ubicaba libre DeSean Jackson pero el receptor no logró hacerse del balón y perdió la posibilidad de dar vuelta el marcador tras un final para el infarto.

Con la derrota, los Falcons siguen en la última posición de la NFC Sur con record 2-4. Igualmente, este triunfo es importante por tratarse de un rival directo de división y porque pudo descontarle un juego a Carolina Panthers que cayeron ante los Washington Redskins. Por su parte, Tampa (2-3) perdió por tercera vez consecutiva y no encuentra el rumbo tras un gran comienzo.

La próxima semana, Atlanta será local ante los alicaídos New York Giants en el clásico Monday Night Football. Los Buccaneers recibirán a Cleveland Browns en el estadio Raymond James.