Pasaron 17 años para que Los Ángeles Rams, en ese entonces los Saint Louis Rams,  participen nuevamente en una Super Bowl. Pero al igual que en esa final, los New England Patriots  serán sus rivales. En el año 2002, el resultado de ese juego fue 20-17 para los Patriotas, cotejo que se definió en los últimos segundos con un gol de campo del eterno Adam Vinatieri.

En esta nota, se van a analizar cuáles podrían ser las claves para que el resultado del juego sea diferente a aquel Super Tazón y que los Rams consigan su segundo  el Trofeo Vince Lombardi

Presión constante al mariscal de campo Tom Brady

Wade Phillips, coordinador defensivo de los Rams, tiene muy en claro que es lo que debe realizar su defensa para poder llevarse el encuentro.  La meta será presionar continuamente a Brady y evitar que ejecute sus ofensivas a su antojo. En los dos partidos de playoff de esta temporada, Brady no sufrió ninguna captura y esa fue una las principales causas por la cual la franquicia de la ciudad de Boston se encuentra en este Super Bowl.  Los lineros Aaron Donald, líder en sacks esta temporada en la NFL, Ndamukong Suh, Michael Brockers y Dante Fowler Jr, serán los encargados de apremiar en todo momento a Brady, y si no pueden taclearlo,  deberán intentar que juegue incómodo y que se precipite en sus decisiones.  No será fácil esta tarea, el domingo enfrentarán a una de las mejores líneas ofensivas de la NFL comandada por el centro David Andrews, que además proteger de manera muy efectiva a su mariscal estrella, abren muchos huecos para sus corredores. Wade Phillips, cuando era coordinador defensivo de los Broncos de Denver, ya derrotó a los Patriots en un final de Conferencia, y la principal causa de ese triunfo, fue la presión constante a Brady. Por esa razón, seguramente intentará repetir la estrategia ya que esta línea defensiva de los Rams es la mejor en ese aspecto del juego.

Aaron Donald, lider en capturas en la NFL (foto Rams.com)
Aaron Donald, lider en capturas en la NFL (foto Rams.com)

Evitar posesiones largas

Una de las mayores virtudes de los Patriots toda esta temporada fue la posesión del balón. En la mayoría de los casos y especialmente en la postemporada han realizado posesiones muy largas que consumieron muchísimo tiempo y que culminaron en anotación.  New England no te gana el partido con un pase largo, sino que ejecuta ofensivas muy extensas, desgastantes a cualquier defensiva. El libro de jugadas en estas posesiones comprende corridas por el centro de la cancha con Sony Michel (logró 5 anotaciones), pases cortos a su corredor James White (más de 20 recepciones entre ambos encuentros) y pases al centro de la cancha al receptor Julián Edelman. En otras palabras, son jugadas de poco riesgo, rápidas y muy efectivas. La defensiva carnera debe estar muy atenta a esto.  Los tacles defensivos, Suh y Donald además de meterle presión a Brady como se indicó anteriormente, deberán cerrar todos los huecos posibles paras sea nula la ganancia de yardas mediante los acarreos. Los linebackers Samson Ebukan y Cory Littleton deben estar muy focalizados  a la salida en pase de White. En la final de conferencia frente a los Saints, enfrentaron al corredor Alvin Kamara, que una de sus principales características es salir a recibir pases como lo hace James White. La primera mitad de ese juego sufrieron  esa jugarreta porque Kamara recibió más de 80 de yardas.  Pero en la segunda mitad realizaron los ajustes correspondientes  y Kamara ya no fue tan participativo. Es muy posible, que en el Súper Bowl, imiten lo realizado en esa segunda mitad para silenciar a White.

Establecer el ataque terrestre

En el aspecto ofensivo, el equipo dirigido por el joven Sean Mcvay, deberá imponer su ofensiva tesrrestre para obtener el triunfo. Para lograr que el ataque sea efectivo, es imprescindible que la línea ofensiva comandada por el tacle izquierdo Andrew Whitworth abra agujeros para que los corredores CJ. Anderson y Todd Gurley pueden conseguir muchas yardas. Con Dallas Cowboys, en el partido por la ronda divisional, cosecharon el récord absoluto de la franquicia al obtener más de 270 yardas por tierra. En la final de Conferencia lograron un poco más de 80 yardas que si bien no fue una buena marca, alcanzó para llevarse la victoria. Anderson ha sido una grata sorpresa para el conjunto angelino. Desde que fue adquirido en Diciembre, ha superado las 100 yardas por partido en casi todos los encuentros que participo. Los Patriots con un gran trabajo del apoyador Kyle Van Noy no han permitido que los rivales tengan más de 40 yardas por encuentro, por lo cual será un duro escollo y clave para el desenlace del juego si pueden establecer este ataque.

Pero más allá de Anderson y su labor, el jugador que debe destacarse es Todd Gurley. Debido a problemas de una de sus rodillas, el jugador más determinante de la ofensiva de los Rams ha estado poco tiempo en el campo de juego últimamente. En este juego, si los Rams quieren llevarse la victoria debe estar al 100% físicamente.

Con este jugador dentro de la cancha, además de correr de gran manera, la ofensiva puede emplear un sistema de juego  donde el corredor puede salir a recibir pases. Gurley es un excelente “Running Back” recibiendo pases y ha realizado varias anotaciones en esta temporada atrapando balones. Los Patriotas tienen muchos problemas en la cobertura de esta jugada (Los Chiefs, recién en el final del partido se dieron cuenta de esta deficiencia, pero cuando lo advirtieron realizaron dos anotaciones). Si los Rams pueden maximizar este matchup lo máximo posible, las probabilidades de llevarse triunfo crecen en gran cantidad.

el duo corredon de los Rams, Todd Gurley y CJ Anderson (foto Rams.com)
el duo corredon de los Rams, Todd Gurley y CJ Anderson (foto Rams.com)

Quitarle presión a Jared Goff

El mariscal de campo Jared Goff, en el día domingo, será el mariscal más joven en ser titular en un partido de Súper Bowl.  Goff, muchas veces, dada su juventud y su inexperiencia, ha sucumbido ante la presión de la defensiva rival y en algunas ocasiones por intentar ganar el partido en un jugada ha tomado malas decisiones. Si bien, el partido contra los Saints soportó de gran manera la presión, aun cuando estaban en situación adversa,  los Patriots van a intentar presionarlo físicamente y mentalmente (en esto son los mejores con diferencias abismales con el resto) todo el juego para forzar el error. Por esa razón, McVay deberá ejecutar una ofensiva donde le quite presión a su joven mariscal y lo llene de confianza. Cuando  este jugador entra ritmo, la combinación que tiene con sus receptores Brandin Cooks, Robert Woods y Josh Reynols, puede ser letal.

El mariscal Jared Goff hablando con la prensa (foto Rams.com)
El mariscal Jared Goff hablando con la prensa (foto Rams.com)

Concentración

Otra clave es que no deben perder la concentración. Jugar un Súper Bowl implica convivir con situaciones externas ajenas al juego que pueden hacerle perder el foco a más de un jugador o entrenador  que no tienen experiencia en estas situaciones.  Enfrente, se encuentran a una franquicia que ha participado 8 veces en 17 años en esta instancia y que nada lo afecta y mucho menos lo altera. Si en algún lapso del partido los Rams pierden esa concentración necesaria para un partido de esta envergadura es muy posible que vuelvan a sus casa con una derrota a cuestas.