Sun Yang ha hecho historia, pero no sin polémica de por medio. El nadador chino es el primero en la historia en ganar cuatro veces seguidas la prueba de 400 metros libres en mundiales. Por detrás suya han finalizado el australiano Mack Horton y el italiano Gabriele Detti.

Una de las imágenes del día en la piscina ha llegado a la hora de que estos tres nadadores recogieran su medalla. Como es habitual, tras escucharse el himno del país del ganador, los nadadores se saludan y suben al primer escalón del podio para hacer las fotografías reglamentarias. Detti así lo ha hecho, ha felicitado a ambos y se ha subido al lado de Yang. Pero Horton no ha saludado al chino y tampoco ha subido a la cima del pódium. Ahí empezaba su “rechazo” a Sun, el cual se ha prolongado durante el paseo por la piscina y la fotografía para los medios, manteniéndose siempre a cierta distancia de este.

Este rechazo no es algo nuevo, la primera muestra fue en 2016 cuando Horton le negó el saludo a Sun en los Juegos de Río 2016 porque no tenía tiempo para “los tramposos que se dopan”. Ya que el nadador chino había sido suspendido tres meses en 2014 tras dar positivo en un test antidopaje.

Sun rompió una de las pruebas antidoping

No obstante, en el último año se ha ampliado. El pasado septiembre, Sun recibía la visita de la Agencia Internacional Antidopaje que le iba a realizar un análisis de orina y otro de sangre. Como según él, no estaban correctamente acreditados, solo accedió a realizar la prueba de sangre. En ese escenario llego el doctor de la selección china Ba y unos guardias. A estos últimos la madre de Sun les pidió que trajeran un martillo, con el que posteriormente romperían uno de los dos recipientes que contenían la sangre del nadador. Tras redactarse en el momento un informe de lo acontecido, Yang lo rompió. Lo ocurrido y la posible sanción o no resultante se resolverá después del Mundial, por eso el chino puede participar.

Esto ha generado la queja de muchos nadadores entre lo que se encuentran Adam Peaty o Cate Campbell, esta última dudando de lo relacionado de las sanciones antidopaje, sobre todo cuando se trata de Sun.

Pese a todo, Sun Yang quiere demostrar que es el mejor y, así lo ha hecho con estos 400 metros libres. Una victoria que ha celebrado con bastante rabia cuando se ha subido al pódium.