Por la semana 7 de la NFL, en el “Sunday Night Football” los Eagles de Philadelphia recibirán en Lincoln Financial Field a los Cowboys de Dallas. Este encuentro es sumamente importante para ambas franquicias ya que comparten el liderazgo de la NFC Este y un triunfo en este juego lo mantendrá en esta en esta posición pero en soledad.
A pesar de este liderazgo, las franquicias dirigidas por Doug Pederson (Eagles) y Jason Garrett (Cowboys) están realizando una temporada regular con 3 partidos ganados y 3 partidos perdidos y vienen de capa caída. En su última semana, ambos equipos vienen de perder sus encuentros. Los Eagles, en su visita a Minnesota, cayeron de manera categórica por 38-20 mientras que los Cowboys fueron derrotados de manera sorpresiva por los New York Jets por 24-22 también en calidad de visitante. Vale comentar que este triunfo de los Jets, fue el primero en todo el año, ya que en cinco partidos disputados, los había perdido todos.
Los Cowboys, luego de un comienzo de 3-0, han perdido tres juegos de manera consecutiva y lo preocupante de esto no es la pérdida de los partidos en sí, sino que el juego ofensivo ha decaído de forma abrupta y asusta a todo la fanaticada vaquera.
El mariscal Dak Prescott, después de un gran comienzo, ha realizados malos partidos, con malas decisiones en la ejecución de las jugadas. Esta mala resolución ha provocado que haya lanzado varias intercepciones (6) y que por momentos se vea una muy fea ofensiva.
En cuanto al ataque terrestre, si bien “Zeke Elliott” no está ejecutando una mala temporada (tiene un promedio de 82 yardas por encuentro y totaliza 5 anotaciones), su producción es un mucho menor de la esperado y si los Cowboys quieren volver a la senda del triunfo deben “alimentarlo” en más ocasiones.
El juego aéreo está desarrollando una gran temporada. Los receptores abiertos Michael Gallup y Amari Cooper tienen un promedio de 90 yardas por encuentro cada uno, y entre ambos suman 6 TD. Lamentablemente en el partido del domingo pasado, Cooper se lesionó en uno de sus cuádriceps y su participación en el próximo cotejo está prácticamente descartada.
El domingo, si la franquicia del estado Texas, quiere salir victorioso del encuentro, debe atacar a la secundaria de los Eagles. La defensiva coordinada por Jim Schwartz, es una de las peores cubriendo el ataque por aire. La semana anterior, contra los Vikings, han sufrido 4 anotaciones aéreas, dos de cuales fueron con pases de más de 50 yardas. Si la linea ofensiva de Dallas, le da el tiempo suficiente para que Prescott tire sus pases sin presión, es muy posible que puedan llevarse la victoria. Los Eagles no tiene esquineros que puedan marcar a Gallup, Cobb y Cooper (si es que juega)
En cuanto a la defensiva, si desean ganar este cotejo, la línea defensiva debe presionar a Carson Wentz a como dé lugar. Asimismo, deben estar sumamente concentrados en la cobertura de Ertz y los pases a los corredores (en esta forma de juego, en las Aguilas, se destacan los corredores Miles Sanders y Darren Sproles). Si pueden lograr esto, tienen una gran posibilidad de llevarse el triunfo
La ofensiva de los Eagles es una incógnita, hay partidos que juega de gran manera, atacando los sectores débiles de las defensivas rivales y hay otros donde se lo ven netamente apagados y fuera de ritmo. Este juego es ideal para que vuelvan a restablecerse y elaboren todo su repertorio ofensivo. El tándem corredor, compuesto por Jordan Howard y Miles Sanders, tendrán un difícil matchup enfrentando a los apoyadores Leighton Van Esch y Jaylon Smith, pero ya lo demostró Green Bay, (le realizaron cuatro TD por tierra), que Dallas es una defensiva vulnerable por esa vía y si se línea ofensiva puede abrir los huecos, Howard y Sanders pueden obtener grandes dividendos.
En cuanto al juego aéreo, la lesión de Desean Jackson (hace 5 juego no participa dentro del emparrillado), le quitó al mariscal Carson Wentz el jugador que extiende las defensivas (dada su gran velocidad es quien realiza las rutas largas). Otro detalle no menor, es la caída en el rendimiento de su receptor principal, Zach Ertz. Con solo una anotación en seis juegos y un pobre promedio de yardas por encuentro, este excelente ala cerrada no está produciendo todo que él puede realizar. Si quieren ganar el partido, Ertz debe ser el de años anteriores, sino el triunfo podría estar muy lejos.
En cuanto a la defensiva, si los Eagles quieren ser el único líder de la división, deben mejorar la cobertura de los receptores. Si siguen manteniendo este bajísimo nivel, el domingo tendrán una noche muy larga y poco fructífera. La línea defensiva comandada por Brandon Graham y Fletcher Cox, además de frenar el ataque terrestre (son de los mejor en la Nfl en este rubro), deben presionar continuamente a Prescott para que este tenga que tomar decisiones apresuradas. Como se dijo anteriormente, en estas situaciones de juego, este joven mariscal tiende a realizar muchos errores. Si, los Eagles dominan las trincheras, el triunfo puede estar a la vuelta de la esquina.
Si bien falta mucho para que finalice la temporada regular, este juego es sumamente importante porque podría determinar quién podría ser el ganador de la NFC Este. Sera un juego a “matar o morir” y quien mejor ejecute sus jugadas tanto ofensivas o como defensivas resultará ganador de este gran partido.