Los Chargers se jugaban sus aspiraciones de llegar a playoffs y seguir luchando lo que resta de temporada y con esa consigan salieron a jugar el partido. Pasaron por encima a un desdibujado equipo de los Packers que nunca supo plantarse en el encuentro y dar pelea en el Dignitiy Field de Los Ángeles.
La defensiva de los Chargers despertó con unos inspirados Joey Bosa y Melvin Ingram que pusieron en jaque a la línea ofensiva de los cheeseheads. Los tacles de Green Bay David Bakthiari y Bryan Bulaga fueron los puntos más bajos y permitieron que los edge rushers de los Chargers vivan en el backfield contrario; impidiendo el juego de carrera, que tanto le gusta a Matt LaFleur, y capturando a Aaron Rodgers en 3 ocasiones.
Al final del tercer cuarto los Packers acumulaban 84 yardas totales en el partido. Por primera vez en su carrera Aaron Rodgers y su ofensiva no superaba las 100 yardas en los 3 primeros cuartos.
Esto impidió a Rodgers tener tiempo suficiente para encontrar a sus receptores y también neutralizaron a Aaron Jones, el arma más importante de los Packers en los últimos partidos. Este dominio defensivo de los Chargers no lo supieron traducir en puntos, la defensa de los Packers aunque cedió muchas yardas y jugadas grandes a Philip Rivers y compañía, pero se mostró sólida en la redzone y al final de la primera mitad los angelinos lideraban el enfrentamiento solo con 9 puntos de ventaja gracias a 3 goles de campo de Michael Badgley.
En las primeras 8 semanas de competición el juego de carrera de los Chargers era uno de los peores en la liga, en parte por el holdout de Melvin Gordon y su ausencia del training camp además de varios partidos de temporada regular, cuando Gordon regresó no parecía estar en forma para competir; sin embargo ayer el ex corredor de la universidad de Wisconsin se destapó acumulando 2 anotaciones y 109 yardas totales.
En el último cuarto con el partido ya definido la ofensiva de los Packers finalmente despertó, con un Rodgers jugando con mucho amor propio y finalizando una gran serie ofensiva donde acumuló 9 pases completos en 9 intentos. El running back Jamal Williams sería el encargado de recibir el último pase en la end zone rival. Aaron Rodgers también corrió hasta la zona de anotación para conseguir la conversión de dos puntos acercando a los Packers en el marcador.
Pero el tiempo no dio para más y los Chargers se alzaron con la victoria en un partido donde nunca se sintieron amenazados por los de Green Bay. Los Chargers ahora acumulan un record de 4-5 y mantienen el tercer puesto en la AFC Oeste; mientras tanto los Packers continúan siendo líderes de la NFC Norte con record 7-2.