En la ciudad de Philadelphia en el primer turno del día domingo de la semana 9 de la temporada regular de la NFL se enfrentaron dos franquicias urgidas de victorias como lo son, los Bears de Chicago y los Eagles de Philadelphia. Fue triunfo para el equipo local por 22-14. La figura del encuentro fue el ala cerrada Zach Ertz quien termino el juego con 9 pases atrapados para 103 yardas y una anotación.
En esta nota se analizará el porqué del triunfo del equipo dirigido por Doug Pederson y el porqué de la merma del rendimiento del último campeón de la División Norte de la NFC.
En la primera mitad hubo solo un equipo en cancha. La actuación de los Bears fue paupérrima en ese momento del juego. En los dos primeros cuartos, su mariscal, Mitchell Trubisky completó solo 6 pases para 24 yardas y sufrió tres capturas. Hace tiempo que este mariscal viene jugando de mala manera, y muchos ya comienzan a preguntarse cuando el entrenador en jefe, Matt Nagy, lo va a dejar en la banca y en su reemplazo poner al mariscal sustituto Chase Daniel. Vale agregar, que los Osos al entretiempo se fueron sin puntos en el marcador.
Las Aguilas, por su parte, pudieron establecer el ataque terrestre con los corredores Jordan Howard y Miles Sanders. Para Howard, este era un partido especial, ya que los Bears eran su anterior equipo y en la temporada baja lo intercambiaron a los Eagles. Y finalmente y para alegría de toda la fanaticada águila, Zach Ertz volvió a ser sumamente importante en el juego aéreo. El líder receptor de la franquicia en los últimos años volvió a ser preponderante en el ataque, especialmente en la primera donde recibió 6 pases para 71 yardas y un TD (su segunda en la toda la temporada). Por todo esto argumentado anteriormente, no fue raro que al descanso, los locales se fueran 10-0 en el tanteador.
En la segunda mitad del cotejo, el juego de los Bears mejoró y se acercaron en el marcador (en el último cuarto, se pusieron a solo 5 puntos) pero era demasiado tarde. El líder en esta levantada fue el corredor egresado de la Universidad de Iowa State, David Montgomery. El novato, terminó con 40 yarda en 14 acarreos, dos estos llegaron a las diagonales. Además atrapó el balón en 3 oportunidades para 36 yardas. La defensiva liderada por Khalil Mack embolsó a Carson Wentz en 4 oportunidades y por momentos se pudieron ver destellos de lo que era la defensa del año anterior.
Los Eagles, jamás cayeron en desesperación, y siguieron machacando con el juego terrestre. Sanders y Howard culminaron el día con 29 acarreos, 124 yardas y una anotación (fue realizada por el ex Bears, gracias a un hermosa corrida por el centro de la cancha). Hay que destacar la labor de la linea ofensiva local, que a pesar de las 4 capturas sufridas, Wentz tuvo mucho tiempo para realizar sus lanzamientos y asimismo abrieron muchísimos agujeros para que se escapen los corredores. Otra situación positiva para la franquicia ganadora es que la defensiva coordinada por Jim Schwartz dio un paso hacia adelante en este partido. Antes de este cotejo, la defensiva era una de las peores de la NFL cubriendo el ataque aéreo, permitía mas de 300 yardas por partido. En el día domingo solo permitieron 125 yardas y ninguna anotación. Si bien, esto podría decirse que también es producto del mal juego de Trubisky y compañía. Para que solo concedan estas pocas cantidades de yardas, indefectiblemente tuvo que haber una mejora en la cobertura de esta modalidad de ataque.
Un dato no menor, y que influyó en todo el transcurso del juego, fue la ausencia del tacle defensivo de los Bears, Akiem Hicks. Desde la ausencia de este corpulento linero (por una lesión en su codo hace cuatro juegos no entra al emparrillado), la defensiva coordinada por el ex entrenador en jefe de los Colts, Chuck Pagano, perdió al jugador que sella los huecos y no permite las carreras internas y por eso no es casual que todas las ofensivas rivales puedan correrles con total naturalidad y eficacia.
Con este triunfo (segundo consecutivo), el equipo comandado por Carson Wentz, posee un recod de 5 partidos ganados y 4 partidos, estando a solo un juego del líder la División Este la NFC, los Dallas Cowboys. La semana próxima tendrán semana libre. Esta semana de descanso les vendrá muy bien a la franquicia, ya que le permitirá reponer a jugadores lesionados (como por ejemplo el WR Desean Jackson) y reponer fuerzas para la dura segunda parte de la temporada.
Para los Bears, esta derrota los margina casi definitivamente de la lucha por ganar la División Norte. Con record de 3 ganados y 5 perdidos, los ubica en la última ubicación de la División y a 3 juegos y medio de diferencia del líder, los Green Bay Packers. Si bien matemáticamente tienen chances, el mal juego efectuado en todo el 2019 no da espacio para soñar en una milagrosa resurrección. En la semana 10, serán locales de los Lions de Detroit. Los Lions, dirigidos por Matt Patricia, vienen de perder en el último segundo, con los Raiders de Oakland. Si bien tienen un record muy parecido al de Chicago (tiene 3 ganados 4 perdidos y un empate), su nivel de juego es un poquito superior al de los Bears. Ahora si los Bears quieren fantasear con pelear algún puesto de comodín, es imperioso que salgan ganadores el próximo domingo. De salir con una derrota, se podría decir que la temporada 100 de la NFL, fue un temporada perdida para uno de los equipos más antiguo de la liga.