Las obras del Climate Pledge Arena, futuro hogar de la franquicia, han sido el lugar elegido para desvelar el nombre de la más nueva franquicia de la NHL, Seattle Kraken. Un lugar simbólico en estos tiempos de crisis sanitaria, contando como público con los obreros que levantan la casa del hockey en la ciudad de Seattle, la franquicia se expone como punta de lanza en la construcción de nuevas y esperanzadoras metas.

Un nombre que ya sonaba y para el que se ha escuchado la opinión del público en varias encuestas, el mejor modo de no equivocarse según el portavoz del equipo.

Ahora una bestia dormida, pero que intentará devolver a Seattle la Stanley Cup, que ya en 1917 los Seattle Metropolitans consiguieron para la ciudad. Ese mensaje, junto al de compromiso de desarrollo de la comunidad a través del deporte de equipo más veloz de la tierra han sido los protagonistas del acto.

Una vez desvelado el nombre, solo quedan los uniformes, con colores únicos en la NHL y que se presentarán en breve.