Si bien ser novato en cualquier deporte dentro de una liga profesional es algo complicado y es una ruleta de la fortuna, ya que normalmente tu crecimiento como jugador se va dando con el paso de los años y no es algo inmediato el saber si vas a dar resultados o no.  Ahora os invito a imaginar ser parte del trato de traspaso de uno de los jugadores más importantes de una franquicia con años de tradición, llegar a esta y tener que defender su historia y su legado, este es el caso de Nicholas “Nick” Suzuki.

En 2018 fue parte del acuerdo para que los Montreal Canadiens vendieran a unos recién fundados Golden Knights de Las Vegas, una de las figuras del equipo y su capitán Max Pacioretty, donde también se incluía Tomas Tatar actual líder en puntos, goles y asistencias, este trato al momento ha sido bastante rentable para las dos partes ya que todos los jugadores involucrados han resultado ser valiosos para su respectivos equipos.

¡Un Motor nuevo por favor!

Nick se ha convertido en ese motor, haciéndole honores a su apellido, él mueve al equipo. En palabras de su coach Claude Julien “Él pone las cosas en orden, bastante rápido” y vaya que lo hace, genera una estructura para el ataque de unos Canadiens que necesitaban de este viento nuevo y renovador ya que su juego se notaba poco práctico y nada dinámico.

Suzuki ha provechado la oportunidad otorgada por Claude y no se ha dejado presionar por el peso que puede llegar a tener al pertenecer al equipo que tiene más Stanley Cups, 24 para ser exactos. Y una afición exigente, que le va a apoyar incondicionalmente pero también le exigirá y reclamará  sus errores de la misma manera.

Si bien los Canadiens no tuvieron  la mejor de las temporadas regulares tampoco estaban tan mal. Llegaron a la posición numero 12 de su conferencia, donde  Nick aporto 13 goles y  28 asistencias  para sumar 41 puntos, solo doce puntos por debajo Quinn “El gemelo bueno”. Hughes, otro novato que ha dado mucho de qué hablar y  que es uno de los nombres que suenan para quedarse con el Calder Trophy, y comparte candidatura con Nick a este premio que se otorga al mejor novato de la temporada.

La joven promesa se ha adaptado bastante bien y todo lo bueno que se espera de él lo ha terminado por demostrar en su enfrentamiento del día del sábado ante los Pittsburgh Penguins, donde fue uno de los principales ejes de ataque del equipo hasta el punto de anotar un gol  y que terminaría  contribuyendo con la victoria. Una victoria que nadie se esperaba y que ha servido para convertir a los de Montreal  en un digno rival  y han dejado de ser el equipo víctima del cual se esperaba que los de Pittsburgh arrasaran con ellos. Simplemente ha cambiado la forma de juego de los Canadiens volviéndoles peligrosos en ataque y ayudando a tener una defensa que sofoca a su rival.

En pocas palabras se ha convertido en un jugador indispensable para su club y que hay que seguir de cerca sobre todo en estos playoffs para poder observar sus logros y hasta donde podrá llevar a su equipo.