En un año en el que las injusticias sociales han sido uno de los temas principales, y que han causado protestas a lo largo de Estados Unidos, Matt Dumba ha sido una de las caras que más ha luchado para que este problema sea visible en el entorno de la NHL.

A causa de esto, el jugador de los Minnesota Wild ha recibido el King Clancy Trophy, premio entregado al jugador con más liderazgo dentro y fuera de la pista, haciendo obras de impacto social en su comunidad.

Comprometido con multitud de obras sociales

Dumba ha estado comprometido durante toda la cuarentena con la justicia racial y social, así como la iniciativa de Hockey for everyone. También creó con otros siete jugadores de raza negra la Hockey Diversity Alliance, para intentar erradicar el racismo y la intolerancia en el hockey. 

Después del suceso de la muerte de George Floyd en Minnesota, ciudad en la que Dumba juega, decidió comprometerse a donar dinero para ayudar a reconstruir los negocios saqueados durante las protestas por la controversial muerte de Floyd.

Pese a ser finalista por primera vez del premio que otorga la NHL, su ayuda constante a la comunidad, como la ayuda a 69 familias necesitadas durante el confinamiento, su donación para ayudar a acabar con los incendios de Australia o su participación activa en la noche de los Wild dedicada a concienciar sobre el cáncer han hecho que Matt Dumba se convierta en el ganador de este año por delante de Henrik Lundqvist, quien ya fue finalista el año pasado, y P.K. Subban.

Matt Dumba se convierte en el segundo jugador consecutivo de los Minnesota Wild en ganar este trofeo, ya que Jason  Zucker, recientemente traspasado a los Pittsburgh Penguins, fue el ganador del King Clancy Trophy en la temporada 2018/2019.