Sergei Mozyakin se retira del hockey, probablemente el mejor jugador contemporáneo que jamás pisó una pista de la NHL, pero que deja atrás el hockey profesional con una brillante carrera en la Superliga rusa y KHL en cuanto a clubes y en la selección nacional rusa, plena de honores.
No hay estadística atacante de la KHL que no lidere, 419 goles, 509 asistencias para un total tmabién récord de 928 puntos, a los que se añaden 89 goles ganadores, 150 goles en powerplay, 16goles en prórroga y 2732 tiros contra la portería rival.
Una pléyade de hitos individuales en la competición de liga que se complementan con las dos Copas Gagarin (2014, 2016) que adornan su palmarés, ambas con el club en el que ha dado sus mejores actuaciones, el Metallurg Magnitogorsk.
Y aún así, sin duda la mejor recompensa, la recibió cuando el pasado 7 de febrero en la alineación del Magnitka frente al Barys, en la hoja de la alineación local junto a su nombre, figuraba el de su hijo Andrei, capitán del equipo junior del equipo y que fue reclamado del mismo para jugar con los mayores y abrir el telón de una carrera cuando la de su padre ya llegaba a su fin.
Campeón olímpico y mundial
Con la selección nacional también ha saboreado las mieles del triunfo, ya fuera con los colores de Rusia o de como atleta ruso, el Mundial IIHF y la medalla de oro olímpica también figuran en su historial. Un oro olímpico que curiosamente no consiguió en el cénit de su carrera, coincidente con los juegos de Sochi 2014, al no ser seleccionado para el evento, si no en los de Pyeongchang 2018 cuándo sus números en la liga ya no eran los espectaculares que llegaron a ser.
La aventura americana que no fue
Resulta extraño que un jugador que ha desplegado este enorme talento, nunca haya vestido un jersey de la NHL, pero las circunstancias y sus necesidades personales llevaron a ese resultado.
De hecho, con 19 años dio el salto al hockey junior canadiense, llegando a jugar cuatro partidos con Val-d’Or Foreurs de la QJMHL, pero disputas contractuales le llevaron de vuelta a la competición rusa para permanecer allí para siempre.
Aún así en 2002 fue seleccionado por Columbus Blue Jackets en el puesto 263, aunque la franquicia de Ohio nunca llegó a poder disfrutar esos derechos ya que a pesar de que hubo momentos que desde la gerencia de los casacas azules se intensificaron contactos para llevar al delantero a Estados Unidos, este optó por una estabilidad doméstica para él y su familia antes que el riesgo de una carrera sin éxito asegurado y en un país tan diferente al suyo.
Aún así Mozyakin en su despedida del hockey activo, ha alcanzado los medios no solo de su Rusia natal, si no incluso de los norteamericanos tan tremendamente centrados en sus competiciones locales y muy ajenos a lo que ocurre en otras pistas de hielo del resto del mundo, salvo que influya en la propia NHL.