La palista española consigue su tercera medalla olímpica en estos Juegos de Tokio, tras el primer bronce en Londres (2012) y en Río de Janeiro (2016). El oro se encontraba demasiado cerca para nuestra medallista, pero en esta ocasión ha sido la alemana Ricarda Funk la que se ha hecho con el oro, y la australiana Jessica Fox con el bronce.

Esta se trata de la tercera medalla para España, el tercer metal gracias a la perfecta constante de la piragüista profesional. El avance lento de nuestro país solo supone un arranque en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021 después de la de Adriana Cerezo y la de David Valero.

La profesional de Lasarte-Oria de 38 años de edad y con una posición como séptima en un ranking mundial, ha tenido que esperar a que acabasen las demás participantes para saber qué posición había obtenido junto a la medalla. Se ha posicionado como primera en la tabla de tiempos, teniendo en cuenta el gran tiempo, su crono de 106.63; demostrando una bajada impecable y sumamente limpia que no ha tenido ni una sola penalización con la que quitarle su merecida plata. En el centro de Eslalon de Kasai no ha encontrado rival alguna, ni Kimberley Woods, ni Luuka Jones han podido con ella. Únicamente Funk supera su crono con su puntuación 105.50, que en el último momento consiguió adelantarla a pesar de que estuvo primera.

Chourraut demuestra una vez más que la veteranía que la caracteriza a ella y a muchos de nuestros representantes españoles en Tokio está siendo clave para conseguir los podios que nos llevaremos a casa. Cuatro años después y una pandemia de por medio no han frenado a Maialen, que cercana a sus cuatro décadas de vida deja en buena posición a los deportes de aguas bravas y a su país.