Los Tampa Bay Lightning tenían la posibilidad de cerrar el duelo de Florida y no desaprovecharon la ocasión, tiraron de galones de campeón, volvieron a dejar seca a la ofensiva de los Panthers y después de amagar, hicieron gol para llevarse nunca mejor dicho, el gato al agua.

Mientras tanto en St. Louis, si alguien pensó en cobrarse venganza por la lesión de Jordan Binnington, debió emplear su tiempo en otra cosa, porque Nazem Kadri no solo “no pagó” por su afrenta, si no que salió del Enterprise Center como un rey, tras marcar el primer hat trick de su carrera en playoff.

(4) Tampa Bay Lightning 2-0 Florida Panthers (0)

Está hecho, una vez más los Lightning y además esta vez por la vía rápida, despachan a los Panthers con el hielo en contra, y en este caso para convertirse en finalistas de conferencia.

Los Panthers eran conscientes de que su objetivo era ganar para seguir jugando al menos un día más y sin nada que perder pusieron cerco a la portería de Vasilevskiy, pero tras un inicio de playoff un punto por debajo de lo que es capaz, en esta en general y una vez más en este partido en particular, no dejaba hueco en su portería para que el disco entrara.

Bobrovsky no se quedaba atrás y mantenía la integridad de su portería frente a unos Bolts, que jugando en casa, querían cerrar la tienda en ese momento y en ese lugar y no se dejaban avasallar por sus rivales.

Porteros estelares que mantenían las posibilidades de sus equipos en todo lo alto, con ese nivel de guardametas, el partido apuntaba a que el que primero que marcara se llevaría el premio. Y Tampa Bay pareció hacerlo por dos veces en el segundo periodo, pero los challenge de Florida y las revisiones de vídeo echaron abajo esos tantos que se adivinaban definitivos.

Los Bolts amagaron y acabaron dando, Patrick Maroon a los seis minutos del tercer periodo marcaba el que a la postre sería el gol ganador del partido y de la serie. Un tanto al que no pudieron responder los Panthers, ni siquiera tras el que podía haber sido un error de Ondrej Palat a dos minutos y medio del final, provocando el power play a favor de Florida. Ni con esa superioridad, reforzada por la salida de Bobrovsky para tener un seis contra cuatro, sirvió para romper la fortaleza de Vasilevskiy.

El gol llegó, pero fue el empty netter de Palat que se resarció de su acción anterior y llevó el delirio al banquillo y a todo el Amalie Arena, que veía a su equipo superar su décima eliminatoria consecutiva. Diez victorias que vinieron tras una humillante barrida ante Columbus tras ganar de manera aplastante el Presidents Trophy, un espejo en el que se debe mirar Florida Panthers para seguir adelante con un trabajo que ha sacado al sur de Florida de la mediocridad de la NHL.

(1) St Louis Blues 3-6 Colorado Avalanche (3)

Si este partido fuera un cuadro, se podría titular perfectamente “La segunda afrenta de Nazem Kadri”. Todas las miradas en el Enterprise Center estaban fijas el delantero de Colorado tras el choque que ha provocado la lesión hasta el fin de los playoff de Jordan Binnington. Se olía un ambiente en contra del jugador que traspasaba los sentidos de cualquier espectador del mismo.

David Perron tomó el mando de las operaciones y a los cinco minutos encendía aún más la atmósfera del estadio, pero eso lejos de achantar a Colorado, los acabó convirtiendo en dueños del partido. Y en el segundo periodo ese hacer de Colorado se transformó en goles. Con el segundo periodo recién iniciado, se inició el festival Kadri. Tras el gol de Erik Johnson que hacía el empate, un pase de otro de los corazones de los Avs en estos playoff, Nichushkin, hacia Kadri en la zona neutral, que se plantó ante Husso y marcó el gol que adelantaba a su equipo, seguido de un gesto, suficientemente provocativo para poner la temperatura muy caliente. Otro gol consecutivo de Devon Toews, ponía en el marcador un 3-1 que ponía el partido muy complicado a los Blues.

Más complicado porque lejos de mantener la cabeza fría, una espiral de violencia hacia Kadri, llevaba al congelador a los dos pilares de St. Louis, Buchnevich y Perron. Un cinco contra tres que no dio rédito en los dos minutos, pero con la sanción recién terminada, pero con los Avs en plena inercia de acoso, Nazem Kadri, volvía a abofetear a los de Misuri con el 4-1.

Aún manteniendo un partido a tope de físico, los Blues vieron que solo el hockey podía llevarles a alguna parte, y los anteriormente demonios, Perron y Buchnevich en la parte final del periodo dejaban la distancia en un solo gol.

Pero esta noche tenía nombre, y era el de Kadri, su gol en el ecuador del periodo definitivo, ponía una ventaja de dos goles, marcándose un hat trick que hería aún más a sus rivales, y de propina, una asistencia a Rantanen para que marcara a portería vacía.

En las Rocosas, oportunidad para los locales de pasaportar a sus rivales y alcanzar la final de conferencia, confirmando su favoritismo en el oeste.

VAVEL Logo