España nos ha tenido acostumbrados a realizar discretas participaciones en este deporte. A pesar de ello, no es motivo para desmerecer el papel de nuestros deportistas dado el bajísimo volumen de federados que ha tenido siempre nuestro país, muy al contrario que los países asiáticos.

España participó en la primera edición olímpica de bádminton, de hecho lo hizo por ser el país organizador. Debutó de la mano de David Serrano y Esther Mª Sanz, no pasando ninguno de la primera eliminatoria.

En Atlanta y en Sídney, España no logró representación para esas citas olímpicas. Sin embargo desde Atenas 2004 nunca ha faltado.

La primera victoria de un deportista español no llegó hasta Pekín 2008, donde Yoana Martínez logró pasar de la primera ronda.

Para Río de Janeiro España contará con la representación de Pablo Abián y Carolina Marín. Nunca en nuestra historia se habían generado tantas expectativas respecto a este deporte.

Carolina Marín, ya no es la jovencísima promesa que debutó en Londres con 19 años. Desde entonces ha tenido tiempo de subirse a lo más alto del ranking mundial realizando hazañas absolutamente impensables para nuestro país conquistando dos mundiales y dos europeos. Es sin duda, nuestra gran baza.

Pablo Abián, por otra parte, sigue haciendo historia, serán sus terceros Juegos Olímpicos, el deportista español con más participaciones. Es el único de nuestros deportistas a nivel masculino en lograr una victoria en un partido de unos Juegos Olímpicos. Sin duda, tratará de mejorar sus participaciones anteriores y llegar lo más lejos posible.  

Para terminar hacemos mención a la modalidad de dobles, donde es realmente complicado para un país como España conseguir clasificar una pareja. Sólo se ha conseguido una vez, fue en Atenas 2004 (Sergio Llopis y José A. Crespo). Ni en los dobles femeninos, ni en los mixtos (olímpicos desde Atlanta 96) ha logrado representación el equipo olímpico español.