Carolina Marín inicia sus segundos Juegos Olímpicos con las miras puestas en lo más alto. Ya lo ha dicho en numerosas ocasiones, no se conforma con la medalla, su objetivo es el oro. En nada se parece esta Carolina a la que debutó en unos Juegos Olímpicos en Londres 2012. Ha pasado de ser una prometedora joven a la estrella consolidada actual del bádminton femenino mundial con tan sólo 23 años. Desde Londres 2012 ha logrado dos mundiales (2014 y 2015), dos europeos (2014 y 2016) y dos Super Series Premier (All England y Malasia en 2015), entre otros torneos.

La preocupación de muchos es que le pueda la presión y no pueda realizar su mejor bádminton, pero ella, al revés, ve en la presión una motivación y lleva mucho tiempo preparando esta cita por lo que podemos ser optimistas. De todas formas, los partidos hay que jugarlos y nunca conseguir un oro olímpico fue fácil.

Superando esta fase de grupos se colocará directamente en cuartos ya que los tres primeros del ranking olímpico que pasen la fase de grupos están exentos de los octavos y ella es la número uno del mundo. Tan sólo con pasar los grupos habrá hecho historia, ya que ningún español ha logrado en toda la historia superar esta fase, pero tras todo lo logrado en estos últimos años, la número uno del mundo no se conforma con eso.

Su rival: Nanna Vainio

Su primer rival en estos Juegos Olímpicos es la finlandesa Nanna Vainio, número sesenta del mundo (16:55 hora española). A esta jugadora se ha enfrentado en dos ocasiones obteniendo victorias claras en ambos partidos. El último fue hace bien poco, el pasado mes de abril en el Campeonato de Europa que terminó ganando Marín. Allí la ganó con solvencia (11-21 y 7-21). La otra vez que se enfrentaron fue en 2013 ganando también holgadamente (21-9 y 21-11).