A sus 33 años, la piragüista nacida en Lasarte-Oria, comparecía en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro como una de las opciones más serias de medalla que tendrá España, y ha cumplido los pronósticos. En 2012 llegó su obra culmen al terminar en tercera posición colgándose la medalla de bronce al cuello en los Juegos Olímpicos de Londres, pero ni mucho menos ha estado detenida desde la última cita olímpica, preparándose a conciencia para rendir a gran nivel en Río de Janeiro, y realizando una bajada perfecta en la gran final, un tiempo de 98,65 segundos, el cual le otorgaba la medalla de oro en la prueba de K1 con ni más ni menos que tres segundos de adelanto sobre la neozelandesa Lukule Jones. El gran día de gloria ha llegado para Chourraut, que en Tokyo 2020 buscará revalidar su corona olímpica.

"El sueño específico desde hace cuatro años, pero el sueño olímpico del oro es casi de ocho años, en estos Juegos me he sentido bastante veterana"

Viviendo un sueño hecho realidad, Chourraut no se podía creer lo conseguido, sin pensar por el momento en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 para disfrutar de unas más que merecidas vacaciones. "Todavía no me lo creo demasiado, pero sobre todo feliz, en el podio se siente felicidad, he salido queriendo terminar satisfecha. Quería el oro y ahora lo tengo, no tenía ni idea de si lo iba a conseguir, todavía no lo he asimilado del todo. He soñado muchas veces con conseguir la medalla, lo he visualizado, pero por fin lo he logrado. Las medallas son para pasarlas de mano a mano, para que la gente las disfrute, supongo que está bañada en oro, pesa mucho más que la de Londres. Voy a disfrutar del día de hoy antes de ponerme más trabajo encima, nunca antes había necesitado unas vacaciones, siempre que termino una temporada empiezo la siguiente, pero debemos preparar el ciclo escolar de Ane que empieza en septiembre", comentó en 'Tiempo de Juego' de la Cadena Cope.

Para terminar, Maialen Chourraut llevaba ni más ni menos que ocho años luchando por conseguir una medalla de oro en los Juegos Olímpicos, centrándose desde su bronce en Londres en conseguir la medalla soñada, contando estos últimos cuatro años con una hija de por medio, algo que no le ha impedido reinar en el K1. "El sueño específico desde hace cuatro años, pero el sueño olímpico del oro es casi de ocho años, en estos Juegos me he sentido bastante veterana, en los anteriores no he tenido esa sensación. He perdido un poco de dedicación a mi hija, pero no me puedo quejar porque he podido estar muchas horas con ella, quizás le ha tocado viajar demasiado, ha habido mujeres que han marcado el camino, yo he ido detrás, otras van a ir pasando y poco a poco el camino será más ancho", concluyó.

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Sobre el autor
Diego Blanco Taladriz
Gijón. Moderador de contenidos de VAVEL. Coordinador en las secciones de Tenis y Ciclismo. Puedes leer mis opiniones en @DiegoBlanco93 | E-mail de contacto: [email protected]