Marcus Fraser no quiere bajarse de su particular sueño olímpico. Tras una gran primera jornada en la que firmó el mejor resultado del torneo hasta ahora (63 golpes), el australiano no se arrugó y volvió a jugar bajo par (69 golpes) para alcanzar el doble dígito (-10) y mantener el liderato en solitario. Lo único que varió fue su ventaja respecto a sus perseguidores, ya que esta se vio reducida de los tres golpes del jueves a tan solo uno.

Uno de los responsables de ello fue el belga Thomas Pieters, autor de una de las mejores tarjetas del día en la segunda jornada. Sus 66 golpes (-5) le sirvieron para terminar en segundo lugar (-9)a un solo impacto del líder. Aunque quizá por el que debería estar más preocupado Fraser es por un tal Henrik Stenson. El sueco, el jugador con mejor ranking presente en la competición y uno de los grandes favoritos para llevarse el oro, se situó a únicamente dos golpes de la cabeza (-8), una vez completados los primeros 36 hoyos del torneo. Justin Rose, otro que aparece en muchas quinielas para hacerse con un metal, tampoco anda demasiado lejos (-6).

Rafa Cabrera-Bello es el mejor español y afrontará el fin de semana con plenas opciones de medalla. El canario se rehízo muy bien de una jornada que empezó con un doloroso triple bogey, y terminó con tres birdies revitalizadores para ascender hasta el sexto puesto con -5 en el acumulado. Sergio García, por su parte, no tuvo un buen día y entregó una tarjeta de 72 golpes (+1), que le aleja de la lucha por los metales. El castellonense, vigésimo segundo con -1, se encuentra ahora mismo a siete golpes de los puestos que dan acceso a las medallas.