La triple medallista olímpica, Lydia Valentín, ha anunciado que dejará de competir lo que queda de 2016 con el fin de terminar la completa recuperación de su zona dorsal. El pasado viernes se cumplieron nueve meses desde que se lesionara un día antes de competir en el Mundial. La berciana lleva arrastrando esta lesión desde entonces, y estuvo apurando durante todo el año la recuperación para llegar lo mejor posible a los Juegos Olímpicos de Río. De hecho, ella misma reconoció que, dos meses antes de viajar a Brasil, no sabía seguro si podría competir en la cita olímpica. Finalmente, compitió aunque no pudo dar el máximo.

Así, Valentín, que logró el bronce en los pasados JJOO, se borra del próximo Mundial que se celebrará en octubre en Alemania. Todo para recuperar completamente la lesión y reaparecer en una gran cita, si todo va según lo previsto, en el Europeo del próximo año. Allí, espera estar al 100% y poder pelear por estar en lo más alto del pódium. Eso sí, ella ya sueña con poder prepararse sin más problemas para Tokio 2020, donde espera mejorar todas sus marcas y pelear en condiciones por su cuarto metal olímpico.

Tres medallas olímpicas en tres meses

La medalla de bronce conseguida en Río no ha sido el único metal que ha conseguido la haltera, a pesar de no haber competido. Un mes antes de la cita olímpica, se anunció la descalificación del pódium completo de Londres 2012 en categoría de -77 kg por dopaje. Esto convertía a Lydia Valentín, que había quedado cuarta, en campeona olímpica una olimpiada después. Pero esto no es todo; días después de la ceremonia de clausura de Río, el COI volvió a anunciar más descalificaciones, esta vez en los JJOO de Pekín 2008. Estas nuevas sanciones proclamaron a la berciana plata, siendo este su tercer metal olímpico.