La plana mayor de los deportistas españoles votó con el fin de elegir a sus representantes en el Comité Olímpico Español. Figuras importantes para el bienestar de los deportistas, que han de tener el suficiente carisma para defender sus intereses y batirse el cobre con instituciones para exigir determinadas condiciones. Lo exigible para poder presentarse era haber participado en alguna de las dos últimas ediciones de los Juegos Olímpicos, algo que cumplen con creces los elegidos.

Ruth Beitia, campeona olímpica en Río 2016 y mujer de sobrado carácter y representatividad fue la más votada. La santanderina llegó a ser concejal del Ayuntamiento de la capital cántabra, por lo que tendrá tablas suficientes para este puesto. El segundo fue Saúl Craviotto, medallista en las últimas tres citas olímpicas y cara visible de la superación y el esfuerzo. Joel González tuvo en su juventud y osadía sus principales avales, así como el hecho de haber ganado el oro en Londres 2012 y un bronce en Río 2016. Los otros dos elegidos fueron Jesús Ángel García Bragado, hombre con más participaciones olímpicas en toda la historia, y Mario Pestano, en lo que supone un premio a su trayectoria.

Otros deportistas que se presentaron pero no fueron elegidos fueron Ona Carbonell (sincronizada), Raquel González (atletismo), Diana Martín (atletismo), Concha Montaner (atletismo), Eli Pinedo (balonmano) y Ángel David Rodríguez (atletismo). Una nueva era en el deporte nacional que será liderado por figuras reconocibles en el mundo olímpico español.