Objetivo Oscar 2015: 'Whiplash'
Foto (sin efecto): Grantland.

En contra de lo que pudiera parecer en un principio, Whiplash no es tanto una película musical, o un trabajo sobre jazz. Es una lucha entre dos fuerzas, mentor y alumno, a golpe de batería y sudor. Una contienda sin tregua y en la que el espectador solo coge aire una vez aparecen los títulos de crédito, tras los 107 minutos de metraje.

El director de la película, Damien Chazelle, partió de su propia experiencia como batería y confesó que con Whiplash quiso hacer "una película acerca de la música con el sabor de las películas de guerra o de gánsteres, una película donde los instrumentos reemplazan a las armas, donde las palabras son tan violentas como las pistolas y donde la acción se despliega no en una batalla, sino en un aula de ensayo de un colegio o en el escenario de un concierto".

Intensidad, energía, adrenalina. Un ejercicio vibrante y frenético, que dispara directamente a quemarropa al espectador. Un montaje en el que destacan las escenas musicales, y de manera destacada, la escena inicial y el inconcluso pero excepcional desenlace final.

La película se aleja de una perspectiva tópica de conceptos como la superación o el esfuerzo, arrojando muchos matices al respecto y planteando muchas incógnitas al espectador. Chazelle plantea varias cuestiones, como el miedo al fracaso en el mundo artístico o el miedo del individuo a no ser lo suficientemente bueno, pero quizás la más importante de ellas sea la siguiente: si es el deber de un profesor empujar a un estudiante hacia la grandeza, ¿dónde está el límite? ¿Cómo haces grande a alguien?

La historia

Andrew Neiman (Miles Teller) es un joven y ambicioso batería de jazz que, marcado por los fracasos vitales de su padre, intenta llegar a lo más alto en el mundo de la música. Dentro del conservatorio Shaffer de Nueva York es descubierto por Terence Fletcher (J.K. Simmons), despiadado director del mejor conjunto del centro, y seleccionado para integrarse en el mismo. A partir de ahí Andrew se embarcará en una lucha sin tregua contra la música, contra sí mismo y, especialmente, contra un profesor cuyos métodos lo empujarán hasta el límite más extremo para alcanzar la excelencia.

Reparto

El dúo Teller-Simmons cumple con éxito esa representación del choque entre dos fuerzas.

A Miles Teller pudimos verlo en Rabbit Hole, Footloose o la polémica Project X. Su trabajo en La Prueba del Amor (The Spectacular Now) le valió el Premio Especial del Jurado por Actuación Dramática en Sundance. Interpretando a Andrew Neiman, Teller cumple perfectamente con el papel. Un personaje complejo, excepcional en lo musical pero insatisfecho en todos los demás ámbitos de su vida (sentimental, familiar, amistades). El actor participará este mismo año en La Serie Divergente: Insurgente y en la nueva entrega del clásico Los Cuatro Fantásticos.

Superlativo está J.K. Simmons dando vida a Terence Fletcher, el déspota, agresivo, casi psicópata profesor cuyos controvertidos métodos arrojan dudas sobre su moralidad. Una figura marcial, magnética, casi animal, que puede llegar a recordar a la mítica La Chaqueta Metálica, y que inspira respeto y temor. El actor devora la pantalla en cada una de sus apariciones, ofreciéndonos una interpretación tremendamente sólida que sin duda lo vuelve a poner en el mapa y le ha abierto la puerta a nuevos proyectos, como Terminator: Génesis o la precuela de King Kong. Simmons es un veterano de Hollywood y cuenta con una dilatada carrera en cine y televisión.

Taquilla

Según datos oficiales, desde su estreno en Estados Unidos el 10 de octubre, Whiplash acumula más de 10 millones de dólares recaudados. No es una cifra desorbitada, ni mucho menos, pero es preciso tener en cuenta el carácter independiente de la película. Se trata, por ejemplo, de un dato similar al obtenido por anteriores vencedoras del Festival de Sundance como Bestias del Sur Salvaje o Fruitvale Station. Teniendo en cuenta su presupuesto, en torno a los 3 millones de dólares, podría decirse que ha sido un proyecto rentable. A estos datos positivos, Whiplash suma unos 4 millones de dólares obtenidos en otros países, para un total mundial de unos 14 millones facturados.

Premios conseguidos

La cinta se estrenó en el Festival de Sundance de 2014, donde encandiló a la crítica y obtuvo el Premio a Mejor Película y el Premio del Público.

Desde entonces, la mayoría de los galardones conseguidos por la obra homenajean la magnífica labor interpretativa de J.K. Simmons. Así, el actor ha obtenido ya el Globo de Oro, el BAFTA británico, el Critics Choice, el Satellite Award, el Premio del Sindicato de Actores y numerosísimos premios de asociaciones de críticos cinematográficos (Boston, Chicago, Los Ángeles, Londres, Nueva York, Washington). Además, está nominado al Independent Spirit Award.

Además, Whiplash ha conseguido otras muchas nominaciones en esta temporada de certámenes y premios, reconociendo especialmente el montaje, el sonido y el guión de la película, así como la labor del director (Premio a la Mejor Dirección Novel en la Seminci de Valladolid).

La carrera por el Oscar

Whiplash ha conseguido ser nominada en cinco categorías de los populares premios de la Academia de cine estadounidense:

- Mejor Película: A tenor de las apuestas y de los resultados obtenidos en la temporada de festivales y premios, Whiplash no tiene nada que hacer, salvo sorpresa mayúscula, en la lucha por la estatuilla más preciada, que muy probablemente acabe en las manos de Boyhood o Birdman.

- Mejor Actor de Reparto (J. K. Simmons): Se trata de la opción más clara de éxito para la película en la noche del 22 de febrero. Todo parece indicar que el actor americano verá recompensada su actuación tras todos los premios ya obtenidos. Es una de las categorías menos competidas, en la que ni siquiera un brillante Edward Norton (Birdman) tendrá nada que hacer.

- Mejor Guión Adaptado: No hay una favorita clara. Si bien The Imitation Game parece llevar una pequeña ventaja en las apuestas, una victoria del filme de Damien Chazelle no sorprendería en absoluto.

- Mejor Montaje: Otra categoría tremendamente abierta. Whiplash tiene bastantes opciones, pero se enfrentará a otras candidatas que también apuntan alto por lo brillante de sus montajes como Boyhood.

- Mejor Sonido: Como en la nominación a Mejor Montaje, Whiplash está entre las favoritas a llevarse la estatuilla, pero en este caso su principal contrincante será El Francotirador, de Clint Eastwood. Tampoco hay que destacar una victoria de Interstellar.

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