J.A. Bayona: grandes fragancias extraídas de frascos pequeños
Foto: Irene Izquierdo (VAVEL.com)

Uno de los factores que han llevado a J.A. Bayona a ser uno de los directores más reconocidos de nuestro país, Estados Unidos y diferentes rincones del mundo, a pesar de contar con pocas películas todavía en su filmografía, es la gran capacidad de este cineasta para sacar el máximo partido de los elencos que han conformado las distintas producciones que ha llevado a cabo.

Con Un monstruo viene a verme, Bayona cierra una triología en la que siempre está presente la relación entre madre e hijo. Y entre los repartos de sus tres películas destaca que siempre hay un niño brillando con luz propia. J.A. Bayona ha sabido dar la tonalidad característica a la paleta grisácea de la inexperiencia que portaban estos jóvenes actores. Los tres niños han encontrado en el realizador barcelonés un maestro de sacar partido a las cualidades de cada uno.

Foto: VAVEL

El caso más reciente es el de Lewis MacDougall.  Este intérprete de 14 años nacido en Edimburgo ha roto los esquemas desprendiendo talento por los cuatro ángulos de las pantallas de cine en San Sebastián y en los pases previos que se han realizado del largometraje días antes de su estreno en las salas comerciales.

En el filme, el personaje al que da vida Lewis busca refugio en sus fantasías al no comprender muy bien todo lo que se desencadena a su alrededor. Y es a través de la dirección y los consejos de J.A. Bayona, la persona en la que este joven actor ha podido transformar las fantasías que rondan la cabeza de cualquier niño de su edad en el set de rodaje para convertirlas en una interioración de personaje tan real como las cualidades de este talento sin techo que a partir de ahora tendrá la oportunidad de seguir desprendiendo magia por Hollywood.

Para Tom Holland no hay imposibles

También hay que recordar el vínculo creado entre Bayona y Tom Holland en Lo imposibleSu excelente trabajo en este largometraje que accede a las entrañas del espectadory a sus sentimientos, le valió a Holland para hacerse con el Hollywood Spotlight Award que premia a los talentos emergentes cada año.

Tras saltar a la fama en el musical de Billy Elliot, Tom fue fichado por Bayona y su equipo para ser una de las piezas claves en la primera superproducción del director. Los 30 millones de euros daban para firmar a cualquier intérprete joven que ya contase con más tablas en los sets de rodaje, pero Bayona quedó encandilado con las condiciones mostradas por Tom Holland en la fase de casting. Una fase de selección en la que el joven actor lloró de manera natural, sin artificios, como su forma de trabajar ante las cámaras.

Su papel en Lo imposible requirió a Holland aportar el todo por el todo en concentración mental y fortaleza física para cubrir con garantías las necesidades de un personaje exigente llevado a la gran pantalla por un director que tampoco se conforma con la mediocridad.  Una labor modélica y una simbiosis excelente entre Bayona y Holland que le ha servido al intérprete para formar parte de la serie Wolf Hall, de la película In The Heart of The Sea y tener el honor de ser el nuevo Spiderman en la cinta que se estrenará en 2017 sobre el conocido superhéroe.

Foto: America TV
Foto: America TV

Tampoco iba a pasar desapercibido este factor en la primera película de Bayona, El orfanato. La producción elegida en 2007 para representar a España en los Oscar en la sección de Mejor Película de Habla no Inglesa contaba en su elenco con otro joven actor que se desenvolvió a las mil maravillas en este largometraje que marcó la trayectoria meteórica de J.A. Se trata del actor catalán Roger Princep que, con 13 años, supo conectar a la perfección con Bayona para ganarse incluso una nominación al Premio Goya al Mejor Actor Revelación. 

Foto: El orfanato
Foto: El orfanato

No es fácil dirigir a niños en rodajes de producciones con tanto en juego y con jornadas de trabajo muy extensas en horarios. Sin embargo, J.A. Bayona ha demostrado que es un cineasta que sabe sacar fragancias exquisitas de frascos pequeños. Esencias que quedan en el recuerdo del espectador al hacerlas parte de su cuerpo durante los minutos de metraje y que posteriormente siguen evolucionando en un frasco cada vez más grande pero cuyo cristal ha sido templado por un experto en crear obras que se convierten en piezas esenciales del cine español.

El gran profesor no solo explica, también inspira y J.A. Bayona ha servido de inspiración a estos jóvenes actores que ahora no tienen límites. Su maestría en todos los aspectos de la dirección tampoco. El no tener vértigo ha propiciado que el realizador catalán pueda seguir demostrando que un cine español a lo grande también es posible.

VAVEL Logo