Un final que dejó a muchos con sabor amargo fue el que se emitió por las pantallas de HBO. Fueron diversos momentos icónicos que marcaron el episodio titulado 'The Iron Throne', que cerró un ciclo de ocho años, con la coronación de dos hermanos: Bran Stark, como rey de los seis reinos, y Sansa, como monarca independiente del norte.
Esto luego de que Jon Snow se armara de valor y asesinara al segundo amor de su vida, Daenerys, debido a la proyección que tenía esta de gobernar en los siete reinos: a través del miedo y dando muerte a quienes se podrían interponer en su camino.
Luego de un extenso diálogo entre Tyrion y Jon, este último se dirige hasta donde se encontraba el trono y durante un apasionado beso, Jon apuñala a la madre de dragones. Sin embargo, luego de este acontecimiento, Drogon asciende hasta la planta en la que se encontraban los amantes y se percata de la muerte de Danny, que, enfurecido, lanza su fuego hacia el trono reduciéndolo por completo.
Se da a entender que luego de unas semanas, los lores de las casas más importantes en los sietes reinos, se reúnen para determinar qué ocurrirá con Tyrion y Jon, los cuales permanecían como prisioneros del ejército de los Inmaculados, debido a la conspiración contra Daenerys. Finalmente, los líderes de las casas acuerdan que desde ese momento, el próximo rey sería elegido y se desempeñaría en el cargo hasta el día de su muerte, sin poder dejar en herencia el mandato a sus hijos.
De ese modo, y luego de un discurso de Tyrion, se decide que Bran alias "El roto" Stark, sea el nuevo rey y éste, pide al último de los Lannister como su mano. Luego de esto, se pacta que los Inmaculados pueden establecerse en cualquier lugar y conformar una casa, mientras que el futuro de Jon sería regresar a la Guardia de la noche, ya que, dejarlo en libertad o encarcelado, desataría una nueva guerra contra los Inmaculados.
Así las cosas, los cuatro hermanos Stark se despiden y toman los rumbos ya mencionados, sin embargo, Arya se embarca en un viaje para descubrir lo que existe más allá del mar del poniente, lo cual es desconocido. Por otra parte, Jon, al llegar a la guardia nocturna, se reencuentra con Ghost y Tormund saliendo a recorrer los terrenos más allá de la gran muralla.
Quizás, este no fue el final que se esperaba, estaba claro que no sería un cierre que llenara de felicidad a los televidentes. Muchos querían ver a Jon ocupando el lugar que le correspondía como rey de los siete reinos y de no ser así, Tyrion o Sansa eran los nombres que sonaban como los indicados. No obstante, esta última fue coronada como reina del norte y restándose de los otros seis reinos.
Lo que molestó en la elección de Bran, fue que este personaje no tuvo un rol muy preponderante en la última temporada, salvo, claro, ofrecerse como carnada en la batalla contra los caminantes blancos. Sin embargo, y como mencionó Tyrion, Bran representa la historia de todos en los siete reinos.
Si a los fanáticos de Game of Thrones no les gustó el final de la serie, tendrán que esperar hasta conocer el cierre que George R.R. Martin le de a sus libros, quizás, ahí esta historia tenga una mejor conclusión a la producción de HBO que, sin duda, ha sido una de las mejores series de televisión a nivel mundial.
