Cuando una película presenta unas expectativas tan altas, vas a la sala de cine esperando ver una proyección única y, sobre todo, acudes con entusiasmo de que todas esas buenas críticas que has leído se cumplan. A veces, esa película decepciona, y no entiendes porqué a los espectadores les resulta tan merecedora de buenos calificativos. Sin embargo, no es el caso de Cerdita, una película que cumple, sin duda alguna, con todas las expectativas y que hace que salgas de tu sala de cine favorita repleta de sentimientos encontrados y lanzando una pregunta en el aire: “¿Qué acabo de ver?”
Carlota Pereda ha sido uno de los nombres más sonados en este último mes, y no es para menos, pues ha logrado conquistar a público y críticos con su primer largometraje: Cerdita. Esta historia tan peculiar, que nace de un previo cortometraje con el que consiguió el Goya en 2019, nos lleva a un pueblo de una Extremadura sofocante en la que conocemos a Sara, una adolescente que sufre acoso por parte de un grupo de chicas de su edad que impiden que esta pueda salir a la calle sin ser objetivo de burla y risa por su obesidad. En uno de estos momentos de acoso, en la piscina del pueblo, es cuando la vida de cada una de ellas da un giro inesperado tras cruzarse con un asesino que provoca grandes debates internos en nuestra protagonista, pues de ella depende la seguridad de sus acosadoras.
Con un argumento así, la intriga empieza a nacer por ver qué es lo que ocurre con estas protagonistas que tan bien encarnan una destacada Laura Galán, Claudia Salas o Irene Ferreiro. Todas ellas te sumergen en la historia desde el primer minuto, pues durante la hora y media de película no puedes despegarte de la pantalla. Pereda consigue un ritmo frenético y atractivo que hace que no quieras dejar de ver qué pasa, pues a cada instante el largometraje se adentra en una espiral salvaje de violencia y crueldad que te deja llena de intriga y en suspense por ver cuál va a ser la siguiente escena.
Además, hay que destacar el buen reparto que forma el largometraje. Concretamente, si hay que destacar un personaje, además del de Laura Galán, que ya suena como uno de los posibles nombres nominados a la próxima edición de los Premios Goya, ese es el de Carmen Machi. Esta actriz ha demostrado en cada uno de sus papeles su talento innato para hacer cine, teatro o televisión, sin embargo, no por esta razón hay que dejar de admirar el trabajo que hace en cada uno de sus proyectos, siendo Cerdita uno más de ellos, en el que encarna a la perfección a una madre exigente y trabajadora cuya actitud hacia su hija es, en ocasiones, cuestionable. Al igual que Machi, Pilar Castro da voz a la madre desesperada y sin frenos dispuesta a todo por su hija de una manera excelente.
En realidad, respondiendo a la pregunta que te nace después de ver Cerdita, esa en la que dices “¿Qué acabo de ver?”, la respuesta es sencilla: una película impactante, salvaje, llena de un sol abrasador que arrastra emociones y despierta incomodidad con un reparto que dota de vida a unos personajes oscuros y, sobre todo, desesperados.
