Nico Rosberg, actual líder de la clasificación del mundial, perdió gran parte de su botín de puntos de ventaja en el Gran Premio de Mónaco debido a una pobre actuación teñida de problemas mecánicos y a la victoria de su más inmediato rival y compañero de equipo, Lewis Hamilton. Mientras que este ha conseguido la pole en Canadá alardeando de que podría haberlo hecho todavía mejor, el alemán ha tenido que conformarse con partir desde el segundo lugar de la parrilla de salida.

El que lleva en el morro de su monoplaza el número seis dejó claro delante de los medios presentes en el trazado que considera que su actuación durante el primer intento de la última tanda sí estuvo a la altura a pesar de no haber cumplido su objetivo: "La primera vuelta en Q3 fue buena, no lo suficiente para superar a Lewis, pero fue una buena vuelta".

Además, en sus declaraciones posteriores a la sesión quiso aprovechar la oportunidad para explicar qué fue lo que ocurrió en los momentos finales, así como exponer el motivo por el que se le escapó la cabeza de la tabla de tiempos por tan solo 62 milésimas de segundo a la vez que se mostraba contento por haber vuelto a evidenciar que siguen contando los mejores bólidos: "En la segunda vuelta lanzada lo intenté de nuevo pero bloqueé el neumático, así que bueno, segunda posición, un buen resultado para el equipo demostrando que somos el coche más rápido en una pista única como esta".

Para terminar, recordó que en las 70 vueltas de la carrera pueden pasar infinidad de cosas, sobre todo teniendo en cuenta que tienen sobre ellos un cielo cambiante: "De cara a mañana puede pasar de todo. Lo que pase con la climatología está ahí, así que iremos a por todas desde la segunda plaza".

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