El SUV mediano de Volvo se renueva por completo diez años después con una segunda generación para ponerse al día y seguir complicando la vida a sus coetáneos de las marcas “premium” por excelencia como son el BMW X3, el Mercedes-Benz GLC y el Audi Q5, a los cuales ha superado en ventas.
Este se monta sobre la nueva plataforma modular SPA que estrenó el XC90 acogiendo unas dimensiones de 4,688 metros de longitud, 1,990 metros de anchura y 1,658 metros de altura. El nuevo XC60 crece por lo tanto respecto a su antecesor 6 centímetros de largo, con una batalla 9 centímetros mayor, pero destaca sobre todo por su mayor ancho con una ganancia de 10 centímetros.
La gama mecánica ofrecerá lo mismo que ofrece el XC90, lo cual es toda una declaración de intenciones, pero contará también con las versiones de acceso que se ofrecen en el S90. Abre así la gama en gasolina el T5 con 254 caballos como antesala al T6 de 320 caballos, y en diésel el D4 de 190 caballos acompañando al D5 de 235 caballos. Estará también presente la versión híbrida T8 Twin Engine que desarrolla 407 caballos de potencia.
Una apuesta seria: monta los motores grandes, incluyendo el híbrido de 407 cv
Todas estas versiones contarán de serie con una caja de cambios automática de ocho velocidades por convertidor de par que se encargará de enviar la potencia a las cuatro ruedas en todos los casos.
Pese a ser un SUV, las cotas del XC60 no son del todo malas para defenderse fuera del asfalto en terrenos no muy complicados gracias a una altura libre al suelo de 216 milímetros, a un ángulo de ataque de 23,1°, a un ángulo ventral de 25,5° y a un ángulo de salida de 20,8°.
Pero donde más partido se le podrá sacar a este coche es en carretera, especialmente si se quiere aprovechar, por ejemplo, el ‘Pilot Assist’, que aúna las funciones del control de crucero adaptativo con el sistema de mantenimiento de carril para que el conductor apenas tenga que intervenir. Contará también con un nuevo sistema de seguridad denominado ‘Steer Assist’ que, además de frenar para evitar una colisión a baja velocidad, interviene en la dirección del vehículo para realizar una maniobra esquiva. Algo nuevo en el mundo automovilístico.
Exteriormente mantiene una estética muy reconocible, pero adaptándose perfectamente al diseño que impera en los últimos modelos de Volvo, con la calandra de lamas verticales, el denominado martillo de Thor como firma lumínica en los faros o los pilotos con la forma vista en el V90.
En el interior también existen muchas similitudes con los modelos superiores de la gama, debido al salpicadero presidido por una pantalla táctil de 9 pulgadas dispuesta verticalmente con la que manejar el sistema de infoentretenimiento ‘Sensus’, el cual es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. El espacio para los ocupantes presumiblemente se verá aumentado debido al incremento de la distancia entre ejes, así como el maletero, que crece hasta los 505 litros de capacidad.