Dos semanas han pasado,desde que la noche de Losail viera como los focos del trazado catarí, iluminaban un año más el arranque de una nueva temporada del Campeonato del Mundo de MotoGP. En un fin de semana donde la lluvia hizo reinar el caos, los pilotos de Moto3 -con Joan Mir al mando- estrenaron una nueva temporada que se presenta para la categoría pequeña cuanto menos interesante. Como también lo fue el Gran Premio de Argentina en 2016.
Unas condiciones mixtas seco-mojado, hicieron que Pawi se moviese como pez en el agua y cruzase la linea de meta a más de 26 segundos sobre un Jorge Navarro, que finalizó en la segunda posición. Con su victoria, el malasio hizo historia al convertirse en el primer piloto de su país en conseguir esta gesta dentro del Mundial y demostró, que en condiciones adversas podía rodar rápido.
Siguiendo con la tónica del año pasado y la del Gran Premio de Qatar -en cuanto a la meteorología se refiere-, de cara a este fin de semana tampoco se espera que las condiciones mejoren mucho. Para el sábado se espera una previsión de lluvia y tormenta, que puede prolongarse hasta el domingo con unas temperaturas que raramente superen los 23ºC.
Pero esto no es lo más importante. Aunque la meteorología no esté de cara, toca volver a enfundarse el mono y con ello, hacer frente a los 4727 metros de longitud que presenta el trazado de Termas de Río Hondo, en la que será su cuarta edición dentro del Mundial y a la que Joan Mir, quinto el año pasado, llega como el hombre a batir en la general.
Joan Mir dispuesto a todo
El mallorquín llega pisando fuerte. Ya conoció el sabor de la victoria la temporada pasada y esta, la ha estrenado en el escalón más alto del podio. Cierto es, que las estadísticas de Moto3 dicen que el piloto que inaugura la temporada con victoria no consigue coronarse Campeón a final de temporada pero Mir, está dispuesto a reescribir la historia.
La carrera que cuajó el español en el Gran Premio de Qatar, fue un paseo triunfal para él en el que su inteligencia y su determinación, fueron más brillantes incluso que las luces que alumbraban el espectáculo. Y de nuevo, Mir, quiere volver a brillar. Y quiere hacerlo con luz propia y manteniendo el guión con el que ha arrancado la temporada.
Cierto es, que se contaba con él como posible aspirante al título, pero también hay que decir, que según se fue desarrollando el fin de semana, probablemente no se esperase una actuación de tal calibre por parte de un piloto, que no quiere cerrar unas alas que ha ido abriendo poco a poco hasta llegar a lo más alto. Y a ver quién se las corta.
Igualdad ante todo
Pese a querer seguir manteniendo el mismo nivel que en Losail, muy a pesar del piloto balear, la historia no va a transcurrir ni mucho menos a lo largo de un camino de rosas para él. Ni para ningún otro. Pese mostrar una madurez pasmosa arriba de su máquina, hasta ocho fueron los pilotos que cruzaron la línea de meta dentro del mismo segundo. Y esto le puede poner las cosas difíciles.
Hablar de Moto3, es hacerlo probablemente de la categoría más igualada en este arranque de Mundial y esto, lejos esta de dejar seguir volando a la misma altura al español. Si lo que se busca es ir sobre seguro a la hora de dar un nombre que pueda dominar en la categoría pequeña, lo mejor es cerrar la boca y ver qué pasa. En esta categoría, en la que los pequeños detalles marcarán la diferencia, cualquier mínimo error, por pequeño que parezca, te puede penalizar y mucho.
Nombres como el de Martín, que ya advirtió que su intención es no bajar del podio en lo que resta de temporada -y eso que acaba de empezar-, o como el de Bulega, Fenati o Canet entre otros, también suenan en la lucha por ocupar el escalón más alto del podio y por su puesto, también, por acabar la temporada como el mejor hombre del año.
La guerra está servida. El circuito de Termas de Río Hondo acogerá la segunda batalla de la temporada en una categoría, donde los más pequeños, y no por ello menos importantes, invitan a soñar.