Se ha vuelto a ver a Fernando Alonso en el MCL-32 después de tres semanas de vacaciones.

Tres semanas de merecido descanso, pues Honda parece empezar a reaccionar. En Hungría ambos pilotos sumaron sus primeros puntos y ahora en los entrenamientos del Gran Premio de Bélgica, tanto Fernando como Vandoorne montan una actualización del motor.

En Formula 1 hay que tener paciencia y fe. ESPN ha preguntado al bicampeón si tiene fe en el binomio anglo-nipón, a lo que ha contestado: "He demostrado a todos y he probado que tengo fe en todo. He estado aquí tres años en diferentes situaciones. El primer año fue muy difícil con muchos problemas, el segundo año con un buen progreso y creo que con un coche de mitad de parrilla en la mayoría de carreras"

“Este año empezamos en una situación bastante difícil de nuevo pero ahora hemos empezado otra vez a estar en la mitad de parrilla. Desde el primer día hasta el último, siempre creo en el proyecto y siempre intento ser positivo y optimista, estar cerca del equipo y seguir trabajando, 24 horas al día", explicaba.

Y es que otras estrellas del Gran Circo, ya no presentes en parrilla, como lo son Mark Webber, o incluso el actual campeón del mundo, Nico Rosberg, han dado su punto de vista acerca de la situación que el español acontece en McLaren. Webber decía que Fernando lleva tiempo callándose mientras que el alemán comentaba que no podría aguantar la situación.

"No es que estemos rindiendo por debajo de nuestro nivel porque un grupo de gente quiera. Todo el mundo está dando el 100%, a veces podemos hacerlo, a veces no, en el corto y medio plazo, pero siempre intentaré ayudar al equipo", subraya comprensivo.

ESPN también le preguntó acerca de su paciencia, y de cómo ésta se mantiene en sus trece, sin explotar ninguna vez, a lo que el ovetense respondía: "Porque no tendré ningún beneficio si lo hago. No hay beneficio. Si exploto y gano un segundo en la siguiente carrera porque ellos trabajan más duro, lo hago, pero somos tan rápidos como podemos. Todos los chicos están haciendo el máximo así que estoy agradecido por ello pero obviamente necesitamos más"

McLaren dio septiembre como fecha límite a Honda. Y quedan siete días para que esa fecha llegue y los de Sakura todavía no han sido capaces de dar un coche competitivo a sus pilotos. El futuro de Fernando está más en el aire que nunca. Ni él sabe a día de hoy qué pasará, ni con su porvenir, ni con las mejoras que Honda pueda traer en adelante:

"No soy un experto para saberlo. No tengo sus ideas, no tengo su conocimiento en cuanto al desarrollo de motor, todo lo que sé es que están trabajando día y noche para mejorar el motor. Pero es difícil predecir qué va a ocurrir en los próximos seis o siete meses, cuánto puedes mejorar. Estoy seguro de que harán el mejor trabajo posible y ellos mejorarán tanto como puedan", explicó para finalizar.