El Gran Premio de Italia, que se disputa en el circuito de Monza, está mostrando buenas sensaciones para muchas escuderías. Red Bull, que esta temporada por detrás de Ferrari y Mercedes, aunque en algunas carreras les han sorprendido, es una de esas escuderías. El equipo energético se ha mantenido en las mismas posiciones (quinta y sexta) en las dos primeras sesiones de los entrenamientos libres, y sus pilotos han intercambiado puestos en las primeras sesiones de entrenamientos en el trazado italiano, quedándose detrás de los equipos punteros en la parrilla de salida de la Fórmula 1, un deporte muy competitivo, uno de los que más en todos los deportes de equipo.

Ricciardo, constante en el estreno

El piloto australiano se mantiene en los mismos puestos, al igual que su compañero de equipo, el holandés Max Verstappen. El líder del equipo quiere continuar con su buena racha en el circuito más rápido de todo el calendario, lo que puede ser un impulso a su trayectoria esta temporada, en la que está siendo uno de los más constantes de toda la parrilla da salida. 

"Hoy hemos sido bastante competitivos en estas condiciones. Haremos algunos ajustes menores esta noche, pero generalmente el coche se parece que va muy bien aquí. Si mañana está húmedo probablemente intentaremos todo y veremos si tenemos una oportunidad para conseguir la Pole Position. Si está seco tendremos que valorarlo aún más, porque incluso si estoy en la Pole probablemente empezaré en la zona trasera. A pesar de que tengo la penalización estoy realmente emocionado para el resto de sesiones. Sabemos que empezando en la parte trasera tenemos la oportunidad de tener una carrera divertida. Por supuesto, es decepcionante saber que la probabilidad de un podio en Monza es baja, pero la posibilidad de una carrera divertida es real. Yo esperaba esto hace unas cuantas carreras por lo que estoy preparado. Sin embargo, estoy emocionado por la oportunidad de adelantar a unos cuantos rivales el domingo".

Verstappen se prepara para la acción

Por su parte, el piloto holandés está listo para volver a competir. Después de su enésimo abandono, esta vez en el Gran Premio de Bélgica, el joven piloto quiere enmendar todos los errores cometidos a lo largo de la temporada para poder progresar. Esta segunda mitad de temporada debe ser el asentamiento definitivo de Max, que está dispuesto a marcharse de Red Bull si no le ponen sobre la mesa un monoplaza competitivo.

"Estamos más o menos donde esperábamos estar con el coche hoy. Es difícil para nosotros en esta pista con las largas rectas que hay aquí. Tenemos que combinar de forma correcta una configuración de carga aerodinámica muy baja por lo que tenemos que sacar nuestro mayor potencial. Vamos a empezar la carrera un poco más atrás con las penalizaciones, pero espero poder disfrutar adelantando a un buen número de coches el domingo. Es lógico tomar las sanciones aquí, ya que esta pista ya no es muy buena para nosotros, Singapur es mejor para nuestro coche, así que no queremos arriesgar nada".